Alberto Garzón, en los Cursos de Verano de la UPO
El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha destacado este martes que introduciría un tercer elemento en la relación entre el periodismo y la política, la economía. "Cuando vemos casos como las denominadas 'cloacas del poder', vemos con claridad la vinculación del periodismo y la política con actores económicos: ante esto, debemos estar alerta porque lo que nos jugamos es la democracia", ha dicho.
Garzón ha participado, dentro de los Cursos de Verano que la Universidad Pablo de Olavide que se celebran desde ayer lunes en Carmona (Sevilla), en la conferencia titulada 'La visión de políticos y periodistas' junto a la periodista y tertuliana Esther Palomera, dentro del curso 'Periodismo y política. ¿Poder, contrapoder o connivencia?'.
En declaraciones a Europa Press, ha apuntado que este seminario "es un curso muy bien orientado porque existe una relación de dependencia entre el periodismo y la política, una relación en la que se buscan proteger los espacios propios".
Asimismo, ha señalado que "los medios de comunicación tienen que ser autónomos y su autonomía no sólo tiene que ser frente a la política, sino frente a los poderes económicos que financian con publicidad o directamente condicionan las estructuras de propiedad de los medios".
Ha insistido en que "todo esto hay que ponerlo encima de la mesa sabiendo la dificultad que implica, porque el caso de las cloacas que hemos conocido y que ha supuesto el espionaje de un partido político democrático, un espionaje destinado a construir informaciones falsas para deteriorar la marca de un partido como Podemos, ha tenido una repercusión mínima comparado con la gravedad del hecho".
Ha remarcado que "ni siquiera ha tenido comentarios del resto de formaciones políticas. Hemos tenido este año informaciones, las cuales pueden ser las más graves de la democracia y, sin embargo, no se ha tenido una atención lo suficientemente adecuada".
Preguntado sobre si esos poderes fácticos también están actuando en la investidura del gobierno, el coordinador federal de Izquierda Unida ha comentado que "siempre hay unos intereses establecidos con unas cifras de negocio muy importantes que dependen de la regulación de las leyes de un gobierno; no podemos nunca descartar acontecimientos llamativos como consecuencia de esas presiones".
"En algunos de esos casos, los hemos conocido recientemente. La caída en 2016 de Pedro Sánchez como secretario general del PSOE estaba muy relacionado con esas presiones, que no sólo eran del partido político, sino externas", ha manifestado.
Ha puntualizado que cree que "estamos viendo cómo las grandes empresas presionan a Ciudadanos para que cumpla con lo que esperan las grandes empresas de un partido como Ciudadanos".
--EUROPA PRESS--
