Jorge Lirola Delgado, Profesor de la UAL y miembro del IEA
Hace meses, en el contexto de las elecciones dentro de la Asociación Amigos del Milenio, Ginés Valera Escobar, secretario de la misma, insultó por escrito a mi madre de forma sumamente soez, con reiteración y sin venir a cuento pues ni la conoce; y lo hizo firmando como Jefe del Departamento de Geografía del Instituto de Estudios Almerienses con su cargo público.
Lo puse en conocimiento del Director, Rafael Leopoldo Aguilera Martínez, y también del Presidente del IEA, Gabriel Amat Ayllón, quienes habían nombrado a Ginés Valera pues es un cargo de libre designación. Y les solicité a ambos que tomaran alguna medida: que exigieran que el Sr. Ginés Valera retirara los insultos y pidiera disculpas y, de negarse a hacerlo, fuese cesado. Personalmente, como hijo, como ciudadano que paga sus impuestos y que ayuda a sostener, por tanto, a las Instituciones, y también como miembro del IEA, estoy convencido de que es preciso actuar rápida y enérgicamente cuando se producen estos hechos, máxime en un contexto donde aún abunda la violencia de género tanto física como verbal, y con mayor motivo al vanagloriarse el Sr. Valera de su proeza.
La única medida que se ha tomado ha sido prohibirle que insulte firmando como Jefe del Departamento. Es decir, que tanto para el Sr. Rafael Aguilera como para el Sr. Gabriel Amat cuando alguien se extralimita lo importante no es que rectifique y deje de hacerlo, sino que no los comprometa a ellos; Ginés Valera puede seguir insultando y ser un impresentable y se le mantiene en el cargo público
Sinceramente, a mi me parece más grave el comportamiendo de los Sres. Rafael Aguilera y Gabriel Amat por lo que supone de amparo e incluso de fomento indirecto de la violencia verbal. Así se lo dije a ellos y ahora quiero hacerlo en público.
Con lo sencillo que hubiera sido exigirle al Sr. Ginés Valera que retirara los insultos y se disculpara y, de negarse a hacerlo, cesarlo. Pues no, se ha preferido ampararlo. Quizás en ello haya influido la relación de amistad que parecen tener Rafael Aguilera y Ginés Valera, a quienes se les ve hermanados en temas de cofradías. Con mayor motivo, por el sentimiento religioso, de ser sincero, el primero no debía permitir que el segundo fuera insultando soezmente a madres octogenarias que no han dado ningún motivo para se metan con ellas.
Como anuncié en el último plenario del IEA, de mantenerse el amparo, les pido a los Sres. Aguilera y Amat que dimitan de sus cargos. Soy consciente de que uno de los graves problemas que tenemos en nuestra sociedad es que los sinvergüenzas e impresentables que abusan de los cargos públicos no se van, salvo muy escasas excepciones, y, por tanto, debemos ser los ciudadanos los que los echemos. Se acercan elecciones y por eso les pido a quienes lean esto que no voten a partidos en cuyas filas militan personas que amparan cualquier forma de violencia de género, como es el caso del Sr. Gabriel Amat, que nombró al Sr. Rafael Aguilera y ambos al imprensable Sr. Ginés Valera.