Fernando J. Plaza del Pino, Enfermero del Hospital Torrecárdenas
Desde el 1 de junio los centros sanitarios adscritos a la Plataforma de Logística Sanitaria de Almería, nuestros hospitales y centros de salud públicos, tienen nueva empresa de limpieza. El Servicio Andaluz de Salud ha adjudicado el servicio a Clece por 36 millones de euros para los dos próximos años. La empresa Clece pertenece al grupo ACS (407 millones de beneficios en el primer semestre de 2015). El grupo empresarial que preside Florentino Pérez desde hace unos años ha comenzado a invadir el sector servicios haciéndose con numerosas residencias de mayores, servicios de ayuda a domicilio, servicios de comedor, seguridad y servicios de limpieza de centros públicos entre otros. Siempre con la premisa empresarial de maximizar su beneficio, aunque el coste social sea precarizar y empobrecer a sus trabajadores.
Me centraré en lo que está pasando en el Hospital Torrecardenas. Ya en los días previos al comienzo de la concesión la empresa del Presidente del Real Madrid mostró su verdadera cara al amenazar con despidos a las trabajadoras de la limpieza subrogadas si no aceptaban nuevas condiciones laborales; aumento de jornada y reducciones salariales, cuando la Ley le exigía mantener las condiciones previas. Desde el minuto uno Clece ya estaba obsesionada con sacar el máximo de beneficio a costa de la Sanidad Pública almeriense, los 36 millones de euros le saben a poco. Solo la amenaza de una huelga hizo que reconsiderara su postura y buscara otras formas de aumentar su ganancia.
Desde que Clece se encarga de la limpieza del hospital el servicio se ha deteriorado; las propias trabajadoras se quejan de la mala calidad de los productos y materiales con los que están trabajando y de cómo sus cargas de trabajo están aumentando de tal manera que les es imposible mantener unas condiciones higiénicas mínimas en el centro. A modo de ejemplo; los fines de semana donde antes había cuatro limpiadoras ahora solo hay una (una por cada planta del hospital), para toda la UCI (tanto de adultos como pediátrica) solo hay una persona, por las tardes una persona cubre dos plantas completas,... y suma y sigue.
La limpieza de los hospitales y los centros de salud de nuestra provincia se deteriora cada vez más a medida que pasan las semanas con las probables consecuencias negativas para pacientes y profesionales de la salud; en cualquier centro sanitario la higiene máxima es prioritaria para evitar infecciones nosocomiales (las producidas en el propio centro).
Lo más indignante es que esta situación no se da por “la crisis” o porque no haya recursos suficientes para asegurar la mejor limpieza sino porque la empresa Clece no está cumpliendo con el pliego de condiciones que firmo para hacerse con la concesión del servicio Y lo peor es que parece ser que a nadie le importa.
Es responsabilidad directa de las direcciones de los centros sanitarios supervisar el estricto cumplimiento de lo pactado, directivos elegidos por el Gobierno del PSOE de la Junta de Andalucía a través de la Gerencia del SAS.
Esta situación, en la que una empresa concesionaria incumple con sus obligaciones con el silencio cómplice de la administración que la contrata, me recuerda otro caso muy cercano para Almería; el de la UTE Acciona-La Generala, encargada de la limpieza urbana y de playas de Almería, en este caso quien mira para otro lado mientras la ciudad cada vez está más sucia es el Ayuntamiento del Partido Popular.
Me surge una pregunta, aunque sospecho la respuesta: Estos políticos (del PSOE, del PP) que no controlan las empresas con las que privatizan los servicios públicos, ¿si no trabajan para garantizar buenos servicios para la ciudadanía, para quién trabajan?
¿O es que a nadie le importa? A mí sí.
