El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, ha señalado que "quizás sea una manera de exagerar" el hecho de comparar aulas con "barracones militares de Afganistán", pero espera que "sea una llamada de atención para que gente entienda la realidad en la que estamos".
Así ha respondido Imbroda a los periodistas en Sevilla antes de presidir la entrega de los premios del Concurso Escolar del Grupo Social ONCE, al ser preguntado por las afirmaciones realizadas este miércoles en la Comisión de Educación en el Parlamento.
En este sentido, ha subrayado que la educación "no tiene un problema semántico sino un problema de infraestructuras muy serio", y ha explicado que ha ido a muchos lugares en los que se encuentra con docentes que "hablan de barracones, otros de caracolas, otros de prefabricadas, pero el sentido básico es que tenemos un problema muy grave y de emergencia en nuestras infraestructuras".
"Yo he tenido la oportunidad de ver eso y a veces parece que están en una España muy del siglo pasado", ha añadido el consejero, que al ser cuestionado sobre si le parece acertada la comparación con Afganistán, ha pedido "no tener la piel tan fina" y ha dicho que "es una manera de expresar lo que ha vivido y conocido para que la gente se haga una idea".
"Hay mucha gente que conoce el brillo de muchos centros que tienen en sus entornos, pero no conocen otros muchos centros que están en nuestra comunidad y que no se ven tanto", de modo que "quizás es una manera de exagerar y que sirva de llamada de atención para que la gente entienda la realidad en la que estamos".
Al respecto, ha dicho que se trata de aulas "donde ya no caben, donde no pueden admitir alumnos", una situación "desesperante" para muchos centros, en los que "son los docentes los que están haciendo un enorme esfuerzo para sustituir esas enormes carencias".
Así, Imbroda ha recordado que para resolver esta situación la próxima semana presentarán un plan de infraestructuras para siete años, donde "las 2.742 actuaciones que nos hemos encontrado pendientes desde 2006 estén reflejadas en esa planificación y acometiendo bajos criterios objetivos las necesidades y urgencias".
Por último, y sobre si el plan para eliminar las caracolas del gobierno anterior ha servido para algo, el consejero de Educación ha afirmado que "mínimamente". "No tengo ninguna mentalidad sectaria y todo lo que venga del gobierno anterior lo recojo con sumo gusto, pero una vez conocida la realidad lo que pretendemos es intentar mejorar las situaciones que nos hemos encontrado y muchas de ellas están en están en situación de emergencia educativa", concluye.
--EUROPA PRESS--
