Nuevos colegiados
ALMERÍA.- La delegada del Gobierno, Sonia Ferrer, ha presidido esta mañana junto al vicepresidente primero del Consejo General de Graduados Sociales, Francisco Rodríguez, el acto de colegiación profesional de cinco nuevos graduados sociales. En su intervención, Ferrer ha destacado la relevancia creciente de la función que desempeñan estos técnicos expertos en Derecho Laboral y Seguridad Social en ‘una situación complicada para las relaciones laborales marcadas por la crisis y por una Reforma Laboral que fue presentada como la panacea contra el paro y que se ha mostrado ineficaz’.
Sonia Ferrer se ha referido al impacto del trabajo y de las condiciones laborales en la economía del país y en el modelo de sociedad y a sus repercusiones en las personas y sus familias, ‘en su dignidad, en su proyecto de vida y en sus expectativas’. A los servicios que los graduados sociales prestan a trabajadores, empresas y entidades en materia laboral y de seguridad social, se unen sus funciones en el ámbito de la prevención de riesgos y en la mediación extrajudicial, un sistema eficaz para la resolución de conflictos y la reducción de los niveles de litigiosidad.
‘Remplazar el pleito judicial ordinario por el acuerdo previo entre las partes, a través de la mediación, ofrece una respuesta más ágil, más eficaz y más cercana’, ha señalado la delegada del Gobierno que se ha referido a las experiencias desarrolladas en Andalucía en la resolución de controversias fuera del ámbito judicial en materia de consumo, en conflictos familiares, en el campo de la justicia juvenil y en el terreno laboral a través de la acción del SERCLA, del Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales.
La Junta de Andalucía defiende un sistema de justicia ágil, cercana al ciudadano, garantista con los procesados, pero defensora de las víctimas. ‘Una justicia que, sobre todo en el ámbito civil, elimine burocracia, y que busque el acuerdo antes que el pleito’, ha señalado la delegada
Para Ferrer la especialización, el intercambio de ideas y experiencias entre profesionales y la formación continua son ‘claves en la labor de un graduado social y redundan en la calidad profesional de los servicios que prestan y en la mejora del servicio público de Justicia a la ciudadanía, pieza esencial de nuestro sistema democrático’.
