Normalmente, cuando pensamos en el seguro de nuestro automóvil, solemos tener en cuenta sólo las necesidades de asistencia que pueden surgir mientras nos estamos desplazando por nuestra ciudad o la carretera, mientras trabajamos o durante la rutina. Pero, ¿qué pasa con los seguros de coche cuando realizamos un viaje largo, sea por cuestiones personales o de turismo?
Lamentablemente, muchas personas descubren que jamás se han hecho esta pregunta hasta que algo malo les sucede y es entonces cuando comprueban que su póliza no les cubre frente a tales circunstancias. En otras palabras, es habitual que menospreciemos la vital importancia que posee una cobertura de asistencia en viaje cuando contratamos la póliza del vehículo.
Esta cobertura, que suele estar incluida de una u otra forma en las propuestas que hacen la compañía asegurada, puede no obstante distar demasiado en cuanto a la protección final que brinda. Por eso es esencial que prestemos atención a las condiciones del contrato y el derecho que nos asiste. De lo contrario, es posible que pasemos un mal trago lejos de casa.
Frente a cualquier imprevisto lejos de casa, lo más recomendable es disponer de una cobertura de asistencia en viaje como parte de nuestro seguro del auto, que sea capaz de cubrir circunstancias como por ejemplo una avería menor o, peor aún, la imposibilidad de circular.
Hay que tener en cuenta, llegados a este punto, que normalmente esta clase de pólizas cubren no sólo al automóvil sino también a las personas que se desplazan en él, asegurándose de que el conductor pueda seguir con su viaje sin sobresaltos una vez solucionado el inconveniente.
Por tanto, se entiende que las compañías del rubro se hacen cargo de otros problemas que pudieran surgir, como por ejemplo el traslado de personas que resultasen heridas en un accidente, el hospedaje en un hotel ante la incapacidad de continuar con el recorrido, etc.
¿Y cuándo contamos con una póliza que asista también durante un viaje? Casi siempre que aseguramos una unidad salida del concesionario, un 0 km, contamos con una cobertura de este tipo. Es lo habitual, aunque mejor sería que eches un ojo al contrato en cuestión para quedarte tranquilo. Sobre todo, porque muchas firmas además establecen una distancia mínima respecto del domicilio indicado, debajo de la cual no se considera que uno se encuentre “en viaje”.
Como todo dependerá, a su vez, del estilo de vida que tengas, es aconsejable que ya mismo revises tu póliza y te pongas en contacto con la aseguradora si notas que hace falta realizar algunas modificaciones, ya sea quitar asistencias como, sobre todo, agregar algunas que pudieras requerir.
Evidentemente, los seguros de coches intentan ofrecer únicamente una cobertura básica en estos casos, y eso puede ser suficiente para la mayoría de los conductores. Sin embargo, si no te encuentras entre ellos porque sueles viajar demasiado, entonces puede ser conveniente que actualices cuanto antes tu póliza. Recuerda que esos cambios pueden tardar un poco antes de hacer efecto, por lo que es mejor que prevengas antes de lamentarte.
