Karst de Sorbas
ALMERÍA.- El Grupo Ecologista Cóndor ha manifestado a la Consejería de Medio Ambiente sus temores ante la posible ampliación de varias concesiones mineras en el Paraje y LIC del Karst en Yesos de Sorbas, ya que supondrían gravísimas destrucciones de parte de estos espacios protegidos por su alto valor ecológico.
Dentro del espacio protegido denominado LIC de Sierra Cabrera – Bédar, lugar con protección comunitaria de acuerdo con la Decisión de Ejecución de la Comisión Europea de 19 de julio de 2012, las compañías Etex y Knauf pretenden que se les prorroguen las concesiones mineras que tienen dentro de estos espacios protegidos, cuando podrían seguir su actividad con las canteras que tienen fuera de estos espacios de alto valor ecológico.
Dentro de la provincia de Almería existen una serie de espacios protegidos y hábitats prioritarios sometidos a la legislación europea. Cuando los yacimientos mineros se encuentran fuera de los espacios protegidos, y cuentan además con las medidas de seguridad para los trabajadores y con planes de restauración del espacio afectado, pueden desarrollarse ya que generan riqueza y empleo, aunque hay que señalar que casi todas son de multinacionales extranjeras con lo que los grandes beneficios se van fuera de nuestras fronteras (Francia, Alemania, Bélgica), quedando aquí solo migajas. Ahora bien, cuando los yacimientos se encuentran dentro de los espacios protegidos por la Ley, no es posible realizar la explotación de estos recursos, ya que existe un bien ambiental a preservar, sobre todo cuando hay recursos minerales ubicados fuera de estos espacios, que se pueden explotar sin afectar a los bienes ambientales. En Almería existe yeso suficiente, fuera de cualquier espacio protegido, que puede permitir la explotación minera al ritmo actual durante cerca de mil años.
Dentro del procedimiento regulado por la Ley en relación con la prórroga de concesiones mineras, el GRUPO ECOLOGISTA CÓNDOR, realizó las alegaciones oportunas, en un amplio documento técnico, ante la Delegación de Medio Ambiente, en la que se concluía la imposibilidad ambiental de poder autorizar la enorme agresión ambiental y el disparate que se proponían realizar estas compañías dentro de un espacio sujeto a protección, sobre el que las Autoridades Ambientales deben adoptar las oportunas medidas de conservación para mantener y restaurar un estado favorable de conservación de los hábitats y las especies que hayan motivado la designación de las zonas protegidas (Como ordena la Directiva Hábitats, apartado 1 del artículo 6), así como evitar actividades perjudiciales que puedan perturbar o deteriorar los tipos de hábitats natural o los hábitats de las especies protegidas. (Como ordena la Directiva Hábitats apartado 2 del artículo 6).
El espacio que pretenden destruir estas multinacionales (ETEX y KNAUF) está considerado textualmente por las autoridades de Medio Ambiente de la forma siguiente: “Desde el punto de vista florístico su importancia radica en ser una de las zonas de mayor diversidad (el catálogo florístico está por encima de las 1.000 especies) de la Península Ibérica tras el macizo de Sierra Nevada y, por tanto, de la Europa continental. Esta gran diversidad se debe a que en este lugar afloran materiales geológicos muy diferentes: rocas volcánicas, yesos, calizas y esquistos, diversidad geológica que contribuye a que se originen formaciones vegetales de elevado interés por su carácter, en muchos casos, endémico o de área muy reducido. Dentro de las más de 1.000 especies de flora afectadas se encuentran numerosas especies en peligro de extinción y que están dentro de las listas de protección. De otra parte hay que señalar la fragilidad frente a las acciones humanas de la flora y vegetación instalada sobre yesos y roca volcánica. Desde el punto de vista faunístico destaca la presencia de tortuga mora (Testudo graeca) con poblaciones originales. A su vez la presencia de aves estepáricas le confiere un interés a nivel nacional, dada la escasez de hábitats similares en la Península. Por otro lado, el elevado número de acantilados favorece el asentamiento como nidificantes de rapaces como el águila real, águila perdicera y halcón peregrino. Destacar, por último, la presencia de algunos mamíferos terrestres como el erizo moruno y la comadreja, representada por la subespecie endémica del sureste ibérico (Mustela nivalis ibérica)”.
A pesar de que los informes técnicos ambientales desaconsejan, sin lugar a dudas, la renovación de las canteras en estos espacios naturales protegidos, en consonancia con la legislación española y europea, desde el Grupo Ecologista Cóndor se teme que desde Medio Ambiente se "abra la mano" a estas multinacionales ya que se están viendo aparecer "empresas conseguidoras" en esta Consejería, cuya misión es “negociar” con Medio Ambiente la aprobación de los temas “imposibles” y hacerlos viables.
