La robótica industrial consigue adaptarse a diferentes sectores, permitiendo la automatización de procesos necesarios. Este es el caso de la electrónica y la tecnología, donde los brazos robóticos se integran a los escenarios industriales, logrando adecuarse a las características de la irremplazable producción 4.0.
Y es que, el ritmo de desarrollo e innovación dentro de estos sectores, así como la necesidad propia de las industrias afines hace obligatoriomantener soluciones a la vanguardia. Colocando a la automatización industrial como primer elemento, y está debe ser eficaz para aplicarse en toda clase de línea de producción. Incluidos aquellos temas relacionados con dispositivos audiovisuales, telefonía móvil o iluminación.
Del ensamblaje manual a la automatización
Tanto la industria electrónica como la tecnología son de gran importancia hoy en día, por ello, es imprescindible que pueden continuar siendo competitivas. Así, esta tendencia a la automatización, no solo logra una optimización en los procesos y cadenas de montaje, también suma un mayor valor agregado a los productos finales.
En este sentido, el entorno cambiante para la tecnología y la electrónica crea periodos de tiempo cortos, en los que las prestaciones de los productos deben cambiar. Modificaciones y mejoras deben ser introducidas a un compás veloz para cubrir las necesidades de los clientes.
Es precisamente allí donde los brazos robóticos hacen su aparición. Por ejemplo, ensamblando un gran lote de placas de circuito, que antes eran manipuladas manualmente por los trabajadores. Esta automatización colaborativa permite tener una fabricación en flujos y por tiempos más extensos.
Estas son las ventajas de los brazos robóticos
La capacidad de automatizar posesos en las líneas de producción es la principal ventaja de la inclusión de los brazos robóticos a la industria. No obstante, también posee otras grandes características y permiten muchas posibilidades:
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Precisión: necesaria en estos sectores, donde las tareas son complejas debido al tamaño y sensibilidad de las piezas. Los brazos robóticos ofrecen una adaptabilidad y una reducción en los márgenes de error.
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Eficiencia: en los recursos y en lo productivo, ayudando a reducir los desechos y permitiendo ventajas de tipo económicas, ambientales y de gestión.
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Productividad: considerada como la gran ventaja de la automatización industrial de mano del brazo robótico. Generando una producción más rentable, cuyo volumen y flexibilidad facilita la necesaria introducción de cambios.
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Seguridad: sustituyendo al personal humano en tareas repetitivas y que puedan representar o convertirse en un problema de seguridad.
Aplicación de la robótica colaborativa en la industria tecnológica y electrónica
Son muchas las tareas que pueden automatizarse en la industria tecnológica y electrónica, por lo que los brazos robóticos son una opción viable y común para las empresas.
A partir de estos, cada compañía puede cubrir tareas diversas y obtener un desarrollo a partir de un proceso simple de reconfiguración.
Así, entre las aplicaciones para las que un brazo robótico es apto, se encuentran:
El montaje
Como ya se mencionó, ensamblar piezas de tipo electrónicas normalmente conlleva el manejo de elementos pequeños y delicados. Requiriendo, muchas veces, de procesos con alto riesgo de manipulación.
Pero, al incorporar un robot colaborativo a las tareas de montaje, la mejora en la precisiónestá garantizada. Además, el rendimiento y la seguridad también estarían presente en dicha cadena de ensamblaje.
En el control de calidad
El control de calidad es imprescindible y determinante para que el valor final de un producto sea obtenido, así como para satisfacer las necesidades de los clientes.
Los sistemas automatizados son más eficaces para conseguir esto, encargándose de la evaluación durante todo el proceso. Posibilitando, a su vez, corregir errores y cálculos para disminuir el margen de error, así como para eliminar productos defectuosos.
Para las áreas de pegado y en la soldadura
La precisión de estos robots es de 0,05 mm, y es esta la que permite realizar tareas de ensamblaje y para la fijación de los circuitos. En la obtención de los prototipos también es muy necesaria esta característica.
Sumado a esto, los brazos de tipo robóticos pueden aplicar diferentes clases de soldadura, basado en el material a manipular y el producto que sea. Adaptando, además, la velocidad, la presión y el material adhesivo a utilizar según las condiciones de cada proceso.
