SEVILLA, 12 (EUROPA PRESS)
El Hospital Materno-Infantil Quirónsalud ha indicado que, según los expertos, la relajación en las medidas de protección contra la Covid-19 "ha adelantado y disparado" los casos de bronquiolitis en los menores de dos años.
Según ha informado Quirónsalud en una nota de prensa, salvo durante la pandemia, la sociedad se enfrenta sistemáticamente a las bronquiolitis, con un pico de incidencia durante las últimas semanas de diciembre y primeras de enero.
El centro ha indicado que en torno al 90 por ciento de los niños menores de dos años sufrirá una infección por Virus Sincitial Respiratorio (VRS). De ellos, el 20 por ciento desarrollará una bronquiolitis y el diez por ciento precisará de ingreso hospitalario --entre el dos y el ocho por ciento acudirá a cuidados intensivos--.
La pediatra del Hospital Materno-Infantil Quirónsalud María José Lirola ha explicado que "la bronquiolitis es el primer episodio de 'pitos y crepitantes' --ruidos respiratorios característicos a la auscultación-- que ocurre en el niño menor de dos años, que en los tres o cuatro días previos ha presentado síntomas catarrales, tos, mocos o estornudos, asociados o no a fiebre". "Es la causa más frecuente de hospitalización en el niño menor de un año y está producida en la mayoría de los casos por el VRS", ha añadido.
La especialista ha destacado que en el 2020, las medidas tomadas para la prevención de la diseminación del virus de la Covid-19 --como el distanciamiento social, el incremento de la higiene de manos y el uso obligatorio de mascarillas-- hicieron que las bronquiolitis estuvieran "prácticamente ausentes de las consultas de pediatría".
Esta enfermedad --típica del lactante y de los meses más fríos--, según Quirónsalud, tuvo "una incidencia mínima", al igual que ocurrió con las infecciones por el virus de la gripe.
Según datos recabados por la Sociedad Española de Urgencias Pediátricas, durante la temporada de bronquiolitis 2020-2021, comparada con la anterior 2019-2020, se ha observado una disminución cercana al 91 por ciento de las bronquiolitis diagnosticadas en atención primaria y del 90 por ciento de las atendidas en urgencias hospitalarias.
Quirónsalud ha lamentado que, tras "la relajación" este año de estas medidas preventivas --"debido a la baja incidencia de Covid-19"--, se asista en las últimas semanas "a un brote inusual de infección por VRS, por su precocidad e intensidad".
BRONQUIOLITIS
El centro ha explicado que la bronquiolitis es una enfermedad que se transmite por el contacto con las secreciones respiratorias de las personas infectadas o superficies u objetos contaminados por las mismas.
Por ello, "la higiene de manos es fundamental", ha incidido la especialista. También ha resaltado que transcurrido el periodo de incubación --entre cuatro y cinco días--, el niño comenzará con síntomas catarrales y a los dos o cuatro días entrará en la fase de estado de la enfermedad.
"En esta fase, debido a la inflamación de los bronquiolos y a la excesiva producción de moco, el niño presentará un aumento de la tos, dificultad respiratoria --aumento de la frecuencia respiratoria y aparición de hundimiento costal--, sibilantes y crepitantes, comerá peor y lo encontraremos irritable", ha añadido.
Según Lirola, la duración media de la enfermedad es de unas dos semanas. Sin embargo, hay un tanto por ciento "no despreciable" de niños que se mantendrán sintomáticos entre tres y cuatro semanas, ha matizado.
Los niños prematuros --sobre todo los nacidos antes de las 32 semanas--, los menores de dos meses, los niños con cardiopatías congénitas, con enfermedades neuromusculares, con inmunodeficiencias y con enfermedades respiratorias de base, tendrán "mayor riesgo de presentar la enfermedad grave" y "muchos de ellos precisarán de hospitalización", ha afirmado la pediatra.
Actualmente, el tratamiento para esta enfermedad es "meramente sintomático, y aunque se están haciendo investigaciones y avances importantes en este sentido, no se dispone aún de un tratamiento curativo", ha lamentado Quirónsalud.
El tratamiento, según el centro, se centra en las medidas de sostén: hidratación adecuada siendo con frecuencia necesario fraccionar las tomas, higiene de vías respiratorias altas y mantenimiento de una postura semiincorporada.
Además, Lirola ha apostillado que "habrá que evitar fumar en el entorno del niño y se mantendrá una temperatura adecuada en la estancia". La especialista ha asegurado que la mayoría de los niños se manejarán "de forma adecuada" en sus domicilios siguiendo estas medidas, mientras que aquellos que no se alimenten bien y que presenten un aumento en el trabajo respiratorio serán los que necesitarán hospitalización.
Por ello, Lirola ha hecho hincapié en la importancia de facilitar a los padres "una información adecuada" sobre la bronquiolitis y eso requiere que los médicos que atienden a sus hijos conozcan bien la enfermedad y el manejo más idóneo de la misma, "para así evitar el uso --tan generalizado por otra parte--" de fármacos "no útiles y no carentes en ocasiones de efectos indeseables".
"Los profesionales que atendemos a estos niños debemos dar los mismos mensajes y actuar de forma similar, pues, de esta forma, los padres se sentirán más seguros y los niños estarán mejor tratados", ha indicado Lirola.
La especialista ha concluido que cada año, la bronquiolitis supone un gran incremento de la demanda asistencial y de las hospitalizaciones, por lo que ha propuesto "estar preparados y dotados de recursos suficientes para afrontarlas".
