viernes. 29.03.2024

VERA.- Veraplayazul ha denunciado ante la consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible el "destrozo", que a su juicio, se están realizando en la Charca del Gato, "espacio de alto valor medio ambiental", asegura y ha pedido explicaciones a Codeur, para conocer  las dimensiones de la obra, presupuesto, plazos y forma, sin haber obtenido respuesta aún.

Nota de prensa

Veraplayazul ha denunciado ante la consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible el destrozo de la Charca del Gato, un espacio de alto valor medio ambiental, según se expone en una ficha que recoge todos los Manantiales y Fuentes de Andalucía elaborada por la propia Junta de Andalucía, el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad de Granada y el Instituto del Agua. En esta catalogación, que está financiada con fondos europeos, se señala que “el aislamiento de la charca y las peculiares cualidades de las aguas y las variables ambientales y climáticas reinantes, han favorecido con el tiempo procesos de diferenciación adaptativa, con la aparición frecuente de especies endémicas o raras, y fauna asociada a aguas dulces o hipersalinas y flora como el cañizal”.

La Charca del Gato está conectada, además, con el Salar de los Canos, recientemente declarado Humedal Andaluz o, lo que es lo mismo, de especial protección y amparo. De hecho, constituía la desembocadura de la Rambla del Algarrobo, de cuyas aguas, junto a las subterráneas, se nutría. 

Es la segunda fase de construcción de la Rambla del Algarrobo la que ha tirado no sólo la valla que protegía al enclave sino que ha arrasado con toda la vegetación en la gran longitud que, a lo largo y a lo ancho, la separa del Salar de los Canos. 

En unas obras faraónicas, en las que la primera parte fue subterránea, la pala ha triturado jardines, columpios, árboles y, por supuesto, la Charca del Gato. 

Más desierto

Ha convertido toda la zona en un gran desierto, rodeada por un muro. Propicia para acoger basuras, suciedad, ratas y estancamiento si alguna vez llegara el agua,  que se pretende canalizar para evitar inundaciones en caso de fuertes temporales. Veraplayazul, que representa a 20 urbanizaciones de toda la playa de Vera con más de 8.000 vecinos, ha pedido explicaciones a Codeur sobre la agresión a la Charca del Gato, las dimensiones de la obra, presupuesto, plazos y forma, pues aún falta por conocer cómo saltará la acera del supuesto “paseo marítimo” para desembocar en el mar e, incluso, si existe la posibilidad de que la segunda fase sea también subterránea para evitar el impacto visual y la acumulación citada de suciedad y agua estancada en superficie. La concesionaria mantiene su silencio ante la demanda de información de Veraplayazul transcurridos 15 días. Y eso que cuando se anunció ante la prensa, no ante los vecinos, se divulgó a bombo y platillo un teléfono de información, cuya contestación es remitir a un email y, finalmente, la callada por respuesta.

Veraplayazul siempre se ha mostrado partidaria de evitar las inundaciones en toda la zona, empezando por evitar el “boom urbanístico” en Pueblo Salinas y, por supuesto, impidiendo el ladrillo en el Salar de los Canos, pero la megaobra está mostrando unos perjuicios para el entorno y el medio ambiente que igual hubieran sido evitables con mayor transparencia informativa o inversión en alcantarillado, tal y como anunció en su momento el propio Ayuntamiento de Vera, al que Veraplayazul también le ha trasladado la denuncia y quejas.

Veraplayazul denuncia el "destrozo de un espacio de alto valor medioambiental"