CANJÁYAR.- El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Canjáyar ha mostrado su malestar porque la piscina municipal se encuentra cerrada este verano. El 18 de febrero de 2021, los cuatro concejales socialistas acudieron a visitar el estado de la piscina municipal tras conocer que las obras de los vestuarios estaban paralizadas y el deterioro de la estructura del muro que rodea y cierra la piscina peligraba la apertura en el verano de 2021.
La portavoz del Grupo Municipal Socialista en el consistorio de Canjáyar, Ángela Urrutia García, ha indicado que los argumentos del equipo de Gobierno del PP para mantener cerrada la piscina municipal “son una falta de respeto a los vecinos” ya que, en el fondo, “pretenden ocultar su falta de previsión absoluta y su incompetencia manifiesta ante los asuntos municipales con la afirmación de que el muro que bordea la piscina es un claro peligro para la población ya que se han producido movimientos e importantes grietas en la estructura” y recuerda que esta circunstancia “ya se conocía en 2019 cuando el nuevo equipo de gobierno tomó posesión”.
El equipo de gobierno del PP “debería asumir su falta de compromiso en este asunto, ya que el proyecto para el arreglo de la piscina se presentó en junio de 2021”, ha defendido la portavoz socialista quien considera que existe “la clara evidencia que con tan poca antelación se pudieran llevar a cabo las obras”.
El problema, dice, no es sólo de la piscina, “sino de todo lo que conlleva el edificio”. “El nulo mantenimiento desde el verano de 2018, los vestuarios sin acabar, los sanitarios del restaurante sin finalizar, las reformas de la planta superior donde están las habitaciones inacabadas y el anuncio de la licitación sin efectuar”, ha enumerado.
Por primera vez desde la construcción de la piscina municipal, ha lamentado Urrutia García, “no se da este servicio que es altamente demandado por la población cada verano y que les permite a muchas familias del municipio y a los visitantes disfrutar de una actividad de ocio y de calidad” y ve igualmente “lamentable” que teniendo una instalación como la piscina municipal “no se pueda realizar la tradicional escuela de verano, cursos de natación y diferentes actividades acuáticas para sobrellevar el calor”. Esta circunstancia está obligando a los vecinos y vecinas de Canjáyar a acudir “indignados” a piscinas municipales cercanas como las de Rágol, Padules, Almócita o Beires. “Es de agradecer que los pueblos vecinos hayan empatizado con los canjilones y nos permitan hacer uso de sus piscinas”, ha trasladado la portavoz socialista.
“No podemos olvidar lo desolador que ha sido el año 2020 y que aún continúa por el coronavirus”, ha recordado. “Este año, con más vislumbre que nunca, Canjáyar está repleta de familias que han decidido el municipio como primera opción vacacional tratándose de un destino familiar, lleno cultura y tradición sin necesidad de gastar mucho dinero, hecho que resulta si cabe más significativo y relevante en el contexto de crisis económica actual que la piscina este año no haya abierto sus puertas”, ha sostenido.
