jueves. 28.03.2024

ALMERÍA.- La organización Anticapitalistas Almería ha reclamado, a través de un comunicado, "atención urgente" para las personas afectadas por el último incendio ocurrido en un asentamiento este pasado fin de semana a la vez que piden medidas "para que no vuelva a suceder". Entiende que la ayuda de emergencia "no puede recaer en la espalda de ONGs y solidaridad ciudadana y que atajar el problema de raíz es responsabilidad de administraciones públicas y empresas agrícolas".

Nota de prensa

Anticapitalistas Almería denuncia el racismo institucional que ha permitido durante 30 años que miles de personas vivan en los asentamientos con continuo riesgo de incendio, en condiciones infrahumanas y de explotación laboral. 

El domingo 23 de mayo se producía el tercer incendio de grandes dimensiones en menos de medio año en la comarca de Níjar. Nuevamente aparecían cientos de infraviviendas calcinadas y con ellas todos los enseres de las personas que las habitan. 

La existencia de asentamientos chabolistas en Almería ha sido una vergonzosa realidad ocultada durante décadas para no perjudicar la imagen de la agricultura almeriense, consciente de los efectos que tendría en las exportaciones a otros países europeos visibilizar el incumplimiento sistemático de derechos humanos en el campo almeriense. Sin embargo, el silencio y la falta de actuación no han hecho más que acrecentar una situación cada vez más crítica. Para el diputado andaluz Diego Crespo “ no solo se han invisibilizado durante más de 30 años estos asentamientos sino que se han permitido y se han dejado crecer, todas las administraciones sin excepción son cómplices de que existan estos asentamientos. Para el modelo agrícola almeriense es más sencillo y más beneficioso tener a los trabajadores migrantes del campo andaluz en condiciones de vida precarias e indignas, sin esta política de exclusión el milagroso almeriense hubiese sido imposible”

Actualmente se cifran en 4000 las personas, trabajadores y trabajadoras del campo, que viven en condiciones infrahumanas. Todas ellas expuestas a numerosos riesgos y donde cualquier chispa se acaba convirtiendo en un desastre humanitario.  

Hace 2 días en Huelva, dos personas fallecían en otro incendio en un asentamiento de similares condiciones. Mismo modelos agrícola en ambas partes de Andalucía, mismas consecuencias. ¿Cuántos incendios tienen que suceder, cuántas vidas se tienen que ver arruinadas para que ayuntamientos, junta y gobierno tomen cartas en el asunto?

La organización Anticapitalistas Almería reclama atención urgente para las afectadas por este último incendio y también  medidas para que no vuelva a suceder considerando que la ayuda de emergencia no puede recaer en la espalda de ONGs y solidaridad ciudadana y que atajar el problema de raíz es responsabilidad de administraciones públicas y empresas agrícolas, que se enriquecen con la existencia de estos trabajadores precarios. El diputado anticapitalista insiste “en que la ayuda de emergencia la debe de dar el ayuntamiento de Níjar para resguardar de la lluvia, que no ha dejado de caer a lo largo de todo el domingo, a las más de 200 personas afectadas por el incendio. Si el ayuntamiento no puede dar cobertura a todos los afectados debe de pedir ayuda a la Subdelegación del Gobierno y a la Delegación del Gobierno de la Junta y que ninguna persona del asentamiento se moje ni pase frío. La excusa de las competencias no puede servir para dejar tirados y abandonados a los afectados por el incendio, no intervenir es justificar y permitir el modelo de explotación y exclusión de la agricultura almeriense”

El incendio que se produjo cerca de las 12 de la noche ha dejado sin “vivienda” a cerca de 300 personas y hay persona herida por quemaduras graves que ha sido trasladada a Granada. Durante la mañana han acudido diferentes ONG para ver qué había sucedido y prestar la ayuda de urgencia necesaria. “Por el asentamiento sólo han aparecido las ONG, las administraciones públicas no han aparecido por allí para nada, es muy cómodo estar a gusto y seco en casa viendo la lluvia por la ventana, mientras que cientos de trabajadores migrantes se mojan a la intemperie después de perderlo todo” ha sentenciado Diego Crespo después de acercarse por la mañana al asentamiento de Walili.

Tras el incendio de Atochares, en febrero, no hubo respuesta de las administraciones. El plan anunciado por el ayuntamiento de Níjar a bombo y platillo semanas después no fue más que una medida publicitaria. Un proyecto piloto, sin plazos ni presupuesto concreto y con una capacidad de solo 30 personas es una medida totalmente insuficiente para el tamaño de la problemática que nos encontramos. Las 4000 personas que viven en asentamientos agrícolas en la provincia de Almería necesitan respuestas urgentes y contundentes antes del próximo incendio. Necesitan el compromiso de todas las administraciones por la Regularización Ya, el fin de la explotación laboral y la creación de planes de alternativa habitacional.

Anticapitalistas Almería reclama "atención urgente" para los afectados por el incendio...