ALMERÍA.- Los municipios del Levante de Almería aún calculan los cuantiosos daños de gran envergadura que ha sufrido el litoral desde este pasado lunes ante el temporal de lluvia y los fuertes vientos costeros que han anegado y causado desperfectos en paseos marítimos e instalaciones asociadas; una situación que también se ha identificado en Roquetas de Mar y que en el caso de Vera ha llevado a su ayuntamiento a estudiar la solicitud de "zona catastrófica".
Algunas playas de la localidad veratense han desaparecido prácticamente debido a la retirada de la arena, lo que ha hecho que las viviendas más cercanas a la costa, sobre todo en el Playazo y la zona naturista, queden a una distancia de apenas tres metros con respecto al mar, llegando incluso a penetrar en algunas casas, según el Ayuntamiento.
El alcalde de Vera, José Carmelo Jorge Blanco, ha remitido a la Subdelegación de Gobierno una primera evaluación de daños e imágenes de los desperfectos ocasionados por el oleaje, que "ha destruido pasarelas de hormigón, ha destrozado chiringuitos y mobiliario urbano". "La erosión en la playa naturista de Vera Playa viene siendo una constante en los últimos años", han recordado antes de reclamar actuaciones concretas por parte de Costas.
Por otro lado, el Ayuntamiento de Vera va a publicar un decreto para poder contratar de emergencia los recursos necesarios, dentro de sus competencias municipales, para reparar los daños lo antes posible de cara a la Semana Santa, que en el caso de Pulpí ha dejado unas previsiones con "balance muy negativo", según ha reconocido el concejal de playas de la localidad, Pedro Jesús Martínez.
El edil pulpileño ha indicado que, en una primera aproximación, se han detectado daños por desprendimientos, descalces en taludes, 400 metros de pasarela para acceder a las playas dañadas o "duchas arrancadas de cuajo" así como la pérdida de arena, entre otras pérdidas que se han puesto en conocimiento de otras administraciones.
De forma paralela, desde Pulpí se ha trazado un "plan de trabajo" para iniciar este mismo miércoles, si el tiempo lo permite, "trabajos de reparación, recogida de residuos" y "empezar la limpieza para que a la mayor brevedad, espero que no más de cinco o seis días, la costa vuelva a brillar con la calidad que merece para que sea visitada". "Óptima no estará pero sí con los mínimos de seguridad para que los visitantes puedan disfrutar de ella", ha explicado el concejal.
La zona del Levante y el litoral de Roquetas de Mar se encuentran entre las más dañadas por el temporal de viento, que ha llegado a superar los 70 kilómetros por hora con olas de entre tres y cuatro metros de altura y un gran grado de penetración en las principales playas de los municipios causando importantes destrozos.
"NI UN GRAMO DE ARENA" EN GARRUCHA
"Hemos trasladado la preocupación e importancia de daños a Subdelegación y vamos a hacer lo propio ante la Junta de Andalucía y la Diputación, esperemos que nos socorran y nos ayuden a poner todo en orden", ha explicado la alcaldesa de Garrucha, María López, quien ha señalado que un tramo de casi 400 metros de su playa se encuentra impracticable por la falta de arena y el deterioro de los accesos.
Así, el temporal ha causado importantes destrozos en la iluminación, instalaciones de agua, alcantarillado y en los cinco accesos a la playa, toda vez que al menos dos chiringuitos se han visto anegados y uno ha visto afectada su estructura al quedar descalzado por la retirada de arena. "No ha quedado ni un gramo de arena, se necesita un aporte importantísimo para poder poner en funcionamiento un importante tramo", ha detallado.
Con ello, y de cara la temporada turística de Semana Santa, desde Garrucha se trabaja aún en analizar los desperfectos que han llegado también a casetas de Protección Civil y otras instalaciones para poder adecuar las zonas.
DAÑOS EN EL PASEO Y UN FARO DE CUEVAS DEL ALMANZORA
La situación provocada por el temporal de viento y fenómenos costeros también ha dado lugar a que al menos unos 30 metros del paseo marítimo de la zona del Pozo del Esparto en Cuevas del Almanzora hayan desaparecido al igual que el pequeño faro del puerto deportivo de La Esperanza, que ha sido engullido por el mar, según ha contabilizado el alcalde de la localidad, Antonio Fernández.
El primer edil ha recordado que hace apenas dos meses que se hicieron aportaciones de arena importantes en las playas de Palomares y Quitapellejos, donde "no queda nada", de forma que los 16 kilómetros de costa del litoral cuevano ha sufrido daños de diversa índole, con pasarelas desplazadas y casetas de vigilancia dañadas.
La fuerza del mar ha llevado incluso a que algunas pequeñas embarcaciones fueran arrastradas a las zonas de paseo marítimo. "Está todo sucio y afectado por lo que arrastra el mar, valoraremos algún proceso para poder actuar de urgencia y poder centrarnos al menos en las playas urbanas de cara a la Semana Santa", cuya preparación también se culmina en el municipio.
CARBONERAS BUSCARÁ "TODA LA AYUDA POSIBLE"
El Ayuntamiento de Carboneras ya tiene previsto solicitar ayuda tanto a la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial y el Gobierno de España para poder reparar los daños ocasionados en playas, calles y la red de saneamiento así como algunos monumentos e infraestructuras deportivas. "Va a ser necesaria toda la ayuda posible por parte de las diferentes administraciones para poder actuar de manera urgente", ha avanzado el alcalde, José Luis Amérigo.
"Playas como las del Lancón, que sufre mucho con el Levante, se encuentra muy destrozada, que se ha visto muy afectado el mobiliario de playas y de salvamento, que bastantes calles importantes para el tránsito están dañadas o que se va a tener que intervenir en la red de saneamiento", ha explicado el regidor carbonero, quien también ha identificado desperfectos en el Castillo de San Andrés o el Molino de Viento.
Ante esto, ha incidido en las limitaciones económicas de los municipios para hacer frente a este tipo de coyunturas, por lo que ha señalado la necesidad de contar con "toda la ayuda posible" para que "de manera urgente" se actúe en la recuperación de la instalaciones.
En el caso de Mojácar o Níjar, aún se evalúan los daños que ha provocado la entrada del mar en las playas, con afección en algunas instalaciones de ocio y en el equipamiento de las playas, lo que en algunos casos ha llevado a la Policía Local a acordonar ciertas zonas para impedir el paso de transeúntes y prevenir situaciones de riesgo.
"Una vez finalice el oleaje comunicaremos con Costas para que se produzca la evaluación real y técnica de los daños, independientemente de las labores de limpieza, que de manera urgente podamos acometer", han trasladado desde el Consistorio nijareño.
Por su parte, el alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, ha explicado que tras los vientos de "casi 100 kilómetros por hora" que se registraron en la jornada de este lunes, con "olas que han llegado al Paseo Marítimo", la situación se ha encauzado pese a que se han producido algunos desperfectos cómo árboles caídos o farolas.
EUROPA PRESS
