MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso ha decidido retirar dos votos particulares al proyecto de Ley de Ciencia, que se votará mañana en el pleno de la Cámara Baja para remitirlo al Senado, con el fin de retirar dos enmiendas incorporadas al texto sin el apoyo socialista, referidas a la estabilización del personal investigador universitario y a la vinculación del gasto público en I+D al PIB.
El PdeCAT había advertido este martes de que el PSOE quería eliminar de la ley Ciencia la disposición referida a la estabilización de la carrera del personal investigador universitario en el Sistema Nacional de Salud y que salió adelante únicamente con el voto en contra de los socialistas. Además, el Grupo Socialista había presentado otro voto particular para retirar una enmienda del PP aprobada en el mismo trámite para asegurar la financiación pública en I+D vinculándola al PIB.
Fuentes del Grupo Socialista han confirmado a Europa Press que han decidido retirar finalmente ambos votos particulares al texto, por lo que mañana, si sale adelante el texto, será remitido al Senado con ambos cambios incorporados, aunque no hayan sido avalados por el PSOE. No obstante, todavía quedará el trámite parlamentario en la Cámara Alta, donde se pueden volver a introducir modificaciones al texto.
Precisamente, la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (ASEICA), la Asociación Nacional de Investigadores Hospitalarios (ANIH), la Asociación para el Estudio de la Biología de la Reproducción (ASEBIR) y la Fundación para la Excelencia y la Calidad de la Oncología (ECO) han solicitado este miércoles al Ministerio de Ciencia una revisión integral del proyecto de Ley de la Ciencia o su retirada.
"Esta Ley no es la Ley que España necesita. Hay muchos aspectos como la falta de financiación, falta de competitividad y planes a largo plazo que no se solucionan, pero que podrían haberse mejorado con muchas de las enmiendas presentadas y no aprobadas", explican desde ASEICA.
Estas sociedades científicas lamentan que solo se aprobaran once enmiendas nuevas y siete transaccionales de las más de 400 presentadas por los grupos parlamentarios durante los trámites de Ponencia y Comisión que preceden al debate del texto en el pleno de la Cámara Baja.
Además, alertaban de la posibilidad de que se acabaran retirando del texto las dos enmiendas mencionadas, que finalmente se mantendrán. En todo caso, a pesar de que el PSOE haya rectificado su decisión y retirado los votos particulares, critican otros aspectos de la ley más allá de esas dos enmiendas que consideran "esencial" mantener dentro del texto. Por ello, de cara al debate de mañana, piden que se aprueben distintas enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios.
Concretamente, quieren eliminar la "discriminación" a los investigadores españoles doctores que desarrollan su actividad en el extranjero; mejorar las modalidades de contratación para la Ciencia para paliar el "desastre" que supone la Reforma Laboral en los centros de investigación y en las universidades públicas; evitar la obligatoriedad de los 'informes previos' en los contratos Científico-Técnico; o considerar a los técnicos y gestores como parte del personal que trabaja en ciencia; y llaman a dignificar a los contratos predoctorales.
Igualmente, quieren que el Consejo Asesor de CyT dependa de Presidencia del Gobierno y emita informes obligatorios sobre cualquier legislación que afecte a la ciencia, entre otros aspectos que consideran que se pueden mejorar en el texto con la incorporación de enmiendas que todavía están vivas para el debate que tendrá lugar este jueves.
Por todo ello, ASEICA, ANIH, ASEIBIR y la Fundación ECO manifiestan que esta Ley no es la que necesita el sistema de Ciencia, Tecnología e Innovación español, por lo que piden públicamente "su revisión profunda".
Finalmente, piden que se abra un nuevo periodo de interlocución que permita revisar las propuestas presentadas por grandes asociaciones y entidades que representan a la comunidad científica (en organismos de investigación públicos, centros hospitalarios, y en universidades), para que su voz llegue y se haga efectiva en el Consejo de Ministros y el Congreso de los Diputados.
