MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha afirmado que el resultado de los comicios tiene una dimensión nacional y evidencia que el Gobierno de coalición no lleva buen rumbo, lo que ahonda en su desgaste y en la desmovilización de la izquierda.
También ha desvinculado la debacle de la izquierda del futuro proyecto de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, al recalcar que estos resultados no afectan a su capacidad política y que, como titular de Trabajo, está desplegando un "buen desempeño" en su gestión. A ello, ha sumado un papel importante en la campaña andaluza y que su "implicación" ha sido positiva.
Además, ha recalcado que la cuestión de mayor o menor unidad es la base de todos los problemas de la izquierda, al volver a focalizar de nuevo en que la ciudadanía pasa "factura" al Ejecutivo por la mala situación que atraviesan las clases populares.
NO ES HORA DE REPARTIR CULPAS
En rueda de prensa en el Congreso, ha admitido que en esos comicios hubo un "mal resultado inequívoco" para la izquierda y toca reconocer que el "adversario" ha ganado con un balance "magnífico", que le otorga la mayoría absoluta en esta comunidad al barón popular Juanma Moreno.
Respecto a los resultados de la coalición 'Por Andalucía, conformada por su espacio político junto a Podemos e IU, y del espacio a la izquierda del PSOE, ha destacado que toca una reflexión "seria" y que requiere tiempo, especificando que cuando una noche electoral va "mal" él no se apunta a ser "repartidor de culpas ni candidato a la autoflagelación".
REVÉS AL GOBIERNO: DEBE CORREGIR LA SITUACIÓN
Eso sí, ha destacado que el resultado en Andalucía tiene una vertiente andaluza, que le corresponderá hacer a las fuerzas de la coalición en el territorio, y otra en "clave nacional", donde concluye que este revés evidencia que el "Gobierno no lleva buen rumbo" y sufre desgaste, porque la vida de la gente está peor y es más difícil a causa, por ejemplo, de la alta inflación.
Una tendencia que el Gobierno, para el líder de Más País, sí tiene la responsabilidad de "enmendar" y ello pasa por tomar la iniciativa política y legislativa, ante un clima de "desmovilización masiva" de la izquierda.
Es más, Errejón ha detectado que una razón que denota esta la desactivación de este electorado es que el Gobierno no está cumpliendo las expectativas que le depositaron las bases progresistas, pues buena parte de las medidas comprometidas "no llegan a buen puerto".
De esta forma, la izquierda "paga" doblemente, por el lado de sus adversarios por "existir" y de sus propios simpatizantes "por no hacer" cuando ostenta el Ejecutivo. Por ejemplo, ha criticado algunas medidas del plan anticrisis como el diseño del descuento a los carburantes y ha recetado que el Gobierno debe rebajar su "triunfalismo", retomar la iniciativa y corregir el "rumbo" porque la cosa "no pinta bien".
