jueves. 28.03.2024

La ultraderecha alemana condiciona el envío de armas a Ucrania a su voluntad de sentarse a negociar con Rusia

BERLÍN, 8 (DPA/EP)

El canciller alemán, Olaf Scholz, ha reprochado este miércoles a quienes parecen querer participar en una "competición pública" para ver quién envía más armamento a Ucrania, al mismo tiempo que critica "de manera abierta" a aquellos aliados que no quieren ser parte de esta estrategia.

"Lo que perjudica nuestra unidad es una competición pública de oferta: carros de combate, submarinos, aviones... ¿quién exige más? Lo que perjudica son las duras declaraciones en clave de política interna y las críticas a socios y aliados de manera abierta", ha reprochado durante su intervención en el Bundestag.

Scholz ha advertido de que Alemania no participará en este tipo de debates pues tan solo sirven para beneficiar al presidente ruso, Vladimir Putin, quien puede ver en este tipo de disputas una desunión entre los aliados de Ucrania.

Por ello, ha reclamado tanto dentro de la coalición del Gobierno alemán como entre los aliados occidentales mayor cohesión en lo que respecta a la toma de decisiones sobre el envío de armamento a Ucrania, pues es el mejor activo del que disponen para ayudar a este país a ganar la guerra.

En ese sentido, ha puesto como ejemplos las conversaciones que de "forma confidencial" mantuvieron Berlín y Washington antes de tomar una decisión conjunta sobre el envío de tanques a Ucrania y su posterior anuncio.

Por su parte, la ultraderecha de Alternativa para Alemania (AfD) ha presentado ante el Parlamento una "propuesta de paz" para Ucrania, en la que pide al Gobierno que defiende "firmemente" la creación de una delegación internacional encabezada por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) para que las partes en conflicto acuerden "un alto el fuego inmediato".

La propuesta, que será debatida el jueves en el Bundestag, condiciona el apoyo militar, financiero y político a Ucrania a su voluntad por sentarse a negociar de manera "seria" con Rusia, país al que también se debe exigir "voluntad de diálogo".

En el texto, también se defiende la necesidad de que mientras dure el proceso de negociación las cuatro regiones del este de Ucrania temporalmente ocupadas por Rusia como son Lugansk, Donetsk, Zaporiyia y Jersón sean puestas bajo mandato de Naciones Unidas.

Scholz critica la "competición pública" entre los socios de Ucrania para enviar armas