jueves. 25.04.2024

Ferrer, Iglesias y Ortiz

ALMERÍA.- José Manuel Ortiz, delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, ha situado a la agricultura familiar en la base del llamado ‘modelo Almería’ y ha destacado al pequeño agricultor como el artífice del denominado ‘milagro’ de la horticultura almeriense. Así lo ha manifestado el representante de la Junta en su intervención en el acto de inauguración del VIII Congreso Provincial de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), una convención que sus organizadores han celebrado con el lema ‘Agricultura familiar, somos el futuro’.

El delegado de la Junta, que ha acompañado al congreso de UPA a la delegada del Gobierno de la Junta, Sonia Ferrer, ha afirmado que la sociedad almeriense reconoce y aprecia el trabajo de los agricultores, un sector que en solo unas décadas ha conseguido ser la locomotora de la economía provincial –a cuyo PIB aporta más del 20%-, y que en situaciones de crisis económica y financiera como la actual, se ha convertido en refugio de mano de obra expulsada de otros sectores de la economía de Almería.

En un repaso de la coyuntura del agro provincial de los últimos años, José Manuel Ortiz ha manifestado que “como en todos los periodos, ha habido luces y sombras: campañas que en general han sido buenas en volumen y facturación; y campañas menos buenas -especialmente ésta en la que nos encontramos-, en la que el campo está sufriendo castigos: unos de la Naturaleza, como la sequía –la más severa que ha sufrido la provincia en décadas-; o las tormentas de granizo de El Ejido y Laujar; y otros de naturaleza humana, como la nueva y nefasta PAC, tan perjudicial para Andalucía y Almería; o el reciente acuerdo entre la UE y Marruecos, para la reforma de los precios de entrada de tomate del país norteafricano en Europa, que supondrá un nuevo varapalo para el campo almeriense…. Y si a esto añadimos que los precios de buena parte de los productos hortofrutícolas no han sido buenos esta campaña, pues tenemos una situación bastante complicada”. 

Campaña hortofrutícola 

En un análisis provisional de la campaña 2013-2014 de frutas y hortalizas –aún por ultimar-, el delegado de Agricultura ha advertido de que los bajos precios obtenidos por algunos productos a lo largo de algunos periodos, han afeado el récord histórico de producción logrado por los agricultores, que este año cerrarán con una cosecha de unos 3,4 millones de toneladas, un 10% más que la anterior. Este incremento del volumen se ha logrado, principalmente, gracias al incremento de los rendimientos, ya que la superficie, aunque también ha crecido, lo ha hecho de forma más modesta (un 3%, con más de 55.000 hectáreas, entre cultivos de invernadero y al aire libre). 

Y es que el precio medio obtenido por los agricultores –con el avance de datos hasta finales de mayo- se situará en unos 52 céntimos de euro el kilo, lo que representa un descenso de un 3% sobre la campaña pasada, descenso relativo que podría ser algo mayor cuando se cierre la campaña. 

Pese a este mal dato, el delegado de la Junta ha destacado el hecho de que “gracias al esfuerzo del agricultor por incrementar la productividad de sus explotaciones, hay quienes han conseguido compensar la pérdida de precio con el aumento del volumen de frutas y verduras, con lo que el valor final de la producción en origen de la provincia –la cantidad  percibida por el agricultor- podría mantenerse en los niveles del año anterior, con algo más de 1.700 millones de euros. En cuanto al valor de la producción ya comercializada, crecerá esta campaña por encima del 3%, superando los 2.300 millones de euros. En este resultado de la facturación en destino tienen mucho que ver los resultados de las exportaciones, ya que, con datos de Extenda, elaborados a partir del informe del ICEX, entre septiembre de 2013 y abril de 2014, el volumen de frutas y hortalizas de Almería vendidas en el extranjero ha crecido un 13,6%, mientras que la facturación lo ha hecho en un 3,6%, ya que las cotizaciones han sido más bajas. 

En cualquier caso, José Manuel Ortiz ha precisado que se trata de las grandes cifras de la campaña, “y por tanto, como en todos los balances de macromagnitudes, se habla de medias estadísticas que ocultan una realidad mucho más diversa, ya que en una campaña hortícola conviven situaciones muy distintas, “ya que mientras unos agricultores han podido escapar airosos  -los que han conseguido compensar los malos precios con más producto-; otros, en cambio, no habrán conseguido ingresos ni para hacer frente a los gastos de las explotación, por lo que están atravesando una situación difícil por culpa de las bajas cotizaciones de las producciones”.

Ortiz sitúa a la agricultura familiar y al pequeño agricultor en la base del ‘modelo...
Entrando en la página solicitada Saltar publicidad