VÍCAR.- Llegando el final de la cuenta atrás en la División de Honor Plata Femenina, esta semana se disputa la vigésimo cuarta y antepenúltima jornada, en la que el CBM Vícar Bahía de Almería intentará conservar la séptima posición del Grupo D, el cual está prácticamente decidido en lo que respecta a la lucha por clasificarse para la fase de ascenso y a la de eludir el descenso.
Sin embargo y mientras las matemáticas lo permitan, todavía es pronto para poner nombre al otro conjunto que acompañe al líder Helvetia BM Alcobendas en la carrera por subir a la máxima categoría o al equipo que baja a Primera División Nacional Femenina junto al próximo adversario de las vicarias, BM Morro Jable VC Isla de Fuerteventura.
El encuentro se celebrará este sábado a las 17 horas y como novedad tendrá lugar en el Pabellón Antonio Rivera de la capital, tras tres partidos consecutivos en el Pabellón Municipal José Cano de La Gangosa, por lo que el plantel que dirige Agustín Collado regresa a la instalación de El Zapillo dos meses después, siendo el domingo 21 de enero la última vez que compitió allí.
Sumando 24 puntos al igual que las octavas, CBM Vícar Bahía de Almería se halla a tres de las sextas y ya hay cinco y seis de diferencia respecto al nutrido grupo de equipos que, de forma virtual, aún conservan la esperanza de acaparar el segundo puesto, mientras que las novenas están a tres puntos y las décimas se encuentran seis por debajo, teniendo inalcanzable la séptima plaza por el gol average particular.
La derrota sufrida el pasado sábado frente a CBM Móstoles es posible que no entrara en los planes de las vicarias, quienes cayeron 24-23 en un duelo igualado que llegaron a dominar con dos goles de ventaja en la primera mitad, llegándose al descanso 13-12 al remontar las locales en los últimos minutos y en el segundo tiempo hicieron lo mismo, pues las visitantes vencían 22-23 en el minuto 56.
Por su parte, las de Fuerteventura son colistas y ya están descendidas teniendo tres puntos, perdiendo la semana pasada por 25-16 contra el potente Adesal Córdoba que tardó 17 minutos en abrir brecha en el marcador, y no fue hasta el minuto 40 cuando sentenciaron la contienda. En la primera vuelta, las almerienses vencieron 28-39 en Morro Jable donde al descanso el resultado era 14-19, firmando un parcial ganador de 2-10 en los primeros 10 minutos de la segunda mitad.
El técnico Agustín Collado informa que “volvemos a Almería y tanto este como el último partido frente a Adesal lo jugaremos en el Antonio Rivera”, comentando que “intentaremos acabar el año de la mejor manera posible, tenemos tres partidos para por lo menos irnos con buen sabor de boca y dos en casa para poder dar las gracias a nuestra afición con buen juego y que disfruten”.
Respecto a no tener presión de tipo clasificatorio, el míster almeriense señala que “tenemos que ser conscientes de que es un año transitorio y que el año que viene tenemos que mostrar otro nivel y otra manera de afrontar la liga”, asegurando también que a estas alturas “da igual el rival, no importa, ni vamos a llegar arriba ni vamos a descender”.
Por ello, el entrenador de CBM Bahía de Almería afirma que “lo más importante es encontrarnos a nosotras mismas y realizar buenos partidos para que nos sirva para el año que viene y no acabar de mala manera”, añadiendo que sus jugadoras van a “intentar darlo todo, jugar lo mejor posible y por supuesto competir para llevarnos la victoria”
Siendo un proyecto de futuro, el equipo se nutre de jóvenes jugadoras e incluso en ocasiones debe reforzarse ante las bajas con juveniles, explicando Collado que “desde principio de año empezamos a contar con la juvenil Gemma y se lesionó antes de Navidad y tuvimos complicado volver a contar con ella después porque se ha operado del cruzado. Aunque también ha jugado en varios partidos otra de las juveniles y ha estado muy bien, ha aportado cosas; la base debe seguir creciendo y van a llegar jugadoras que van a aportar mucho talento a este equipo”.
