CÓRDOBA, 18 (EUROPA PRESS)
La delegada de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Trasformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta, Carmen Martínez, ha visitado este miércoles la iniciativa de formación y empleo que desarrolla la Fundación Prode desde finales de marzo, con la que forma a diez personas con discapacidad en especialidades relacionadas con el comercio.
Tal y como ha indicado la Administración autonómica en una nota, la responsable territorial, acompañada por el presidente de Prode, Blas García, ha tenido la oportunidad de charlar con los alumnos-trabajadores y conocer cómo se está desarrollando esta iniciativa.
Los beneficiarios tendrán la oportunidad, durante un año, de obtener dos certificados de profesionalidad, 'Actividades auxiliares de almacén' y 'Actividades auxiliares de comercio', además recibir formación complementaria en materias como prevención de riesgos, manipulación de alimentos, y las relacionadas con la búsqueda de empleo y competencias profesionales.
La delegada ha querido agradecer a Prode que se haya involucrado en este programa, porque de este modo hace llegar estas acciones formativas a un colectivo muy necesitado de ellas, como las personas con discapacidad.
Esta iniciativa es un ejemplo más de la importante labor que esta fundación desarrolla en el ámbito de las personas con discapacidad. Además de este proyecto, esta entidad cuenta con siete Centros Especiales de Empleo que hacen posible que este colectivo consiga una integración laboral, principal paso para lograr una integración social.
Carmen Martínez ha señalado también que entidades como Prode ayudan en la tarea de la inclusión de este colectivo, en todos los ámbitos sociales, en este caso en el ámbito laboral siendo un referente, no solo en la provincia sino en Andalucía, en el ámbito de la puesta en marcha y gestión de centros especiales de empleo, sabiendo adaptar la formación y cualificación del colectivo de personas con discapacidad y creando espacios donde puedan desarrollarla consiguiendo su integración en la sociedad mediante el empleo.
Las personas participantes están contratadas desde el inicio de los proyectos por un año, percibiendo el salario mínimo interprofesional.
