ALMERÍA.- Las trabajadoras de Ayuda a Domicilio de Almería han advertido que, a pesar de haber desconvocado loa movilización prevista para el 25 de enero por la situación de la pandemia, el malestar sigue en los 700 trabajadores de Clece que reclaman un convenio laboral local
Nota de prensa
El 25 de Enero se reunieron en el edificio de los sindicatos, los delegados de las CCOO de Ayuda a Domicilio en representación del Comité de Empresa, con representantes del PCE e IU.
A pesar de tener que desconvocar la movilización fechada para ese día, conscientes del riesgo ante la situación de la pandemia, los motivos para las movilizaciones siguen existiendo debido a la maltrecha situación laboral que se está desarrollando por parte de la empresa Clece y la demora por parte del ayuntamiento de Almería, condiciones laborales que afecta a casi 700 trabajadoras y trabajadores solo en Almería capital, el PCE pidió tener una reunión con las delgadas/os de Comisiones Obreras para conocer de primera mano la situación de las trabajadoras, de cómo se estaba desarrollando el conflicto y mostrar todo su apoyo y ayuda a las trabajadoras.
Y es que actualmente las trabajadoras siguen esperando una subida de salario así como una mejora laboral, proponen un convenio laboral local ya que el estatal no se renueva ni mejora desde hace tres años.
Si bien es cierto que la presión de las trabajadoras hacia el Ayuntamiento se traduce en una propuesta en forma de pliego donde se consiguen concesiones a favor de estas, siguen siendo insuficientes para la dignificación de su trabajo del cual dependen el bienestar de nuestros mayores entre otros.
Tanto el Partido Comunista como Izquierda Unida nos sumamos a las reivindicaciones de las trabajadoras; que no son otras que la subidas de salario como bien se describe en el pliego y la mejora de las condiciones laborales, por ello desde el PCE e IU vemos necesario, como manera de mejorar la situación laboral, una re-municipalización e inversión en lo público. Esperamos que el ayuntamiento no se deje chantajear ni ceda ante las presiones oportunistas de la empresa.
