Mesón Gitano
ALMERÍA.- El concejal de Seguridad y Movilidad y anterior responsable de la Empresa Municipal 'Almería Urban', Manuel Guzmán, ha mostrado hoy su “satisfacción” por la inadmisión a trámite acordada por la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo del recurso de casación presentado por el Colegio Oficial de Arquitectos de Almería contra la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, el pasado 12 de diciembre, avalando el procedimiento escogido por el Ayuntamiento de la capital para la contratación del proyecto y obra del Mesón Gitano mediante un único concurso.
La inadmisión a trámite del recurso se acuerda “al no haberse justificado en el escrito de preparación que las infracciones imputadas a las sentencia hayan sido relevantes y determinantes de la decisión adoptada en la misma”, acuerdo que conlleva además “la imposición de las costas procesales a la parte recurrente”.
Guzmán ha insistido en que esta “esperada” decisión, ahora del Tribunal Supremo, “refuerza” la posición municipal con respecto de un expediente “impoluto”, lo que a su juicio “desmonta” un proceso que ha sido una “caza de brujas” por parte de los responsables del Colegio de Arquitectos, poniendo en entredicho el trabajo no sólo de los responsables políticos municipales, sino también de los propios funcionarios.
Entiende el concejal asimismo que, junto a la sentencia del TSJA del pasado diciembre, la decisión del Tribunal Supremo, viene a reconocer “el trabajo desarrollado desde el Ayuntamiento, de manera especial de sus trabajadores municipales, sobre un expediente que se ha tramitado de manera impecable, tanto en el procedimiento técnico como jurídico y que fue objeto de tres auditorías, obteniendo el conforme de la Administración regional, el Estado y la Unión Europea”, ha recordado.
Guzmán ha insistido una vez más en la "transparencia" de un proceso que ha contado, por parte del Ayuntamiento, con todas las explicaciones necesarias "antes, durante y después" de la adjudicación, cuestionando los intereses “partidistas” que han venido sumando los recurrentes en todo el procedimiento y que han sido “desmontados” en instancia judicial.
En su opinión y llegados a este punto “aquellos que han intentado utilizar el Mesón Gitano para su propio protagonismo y una vez desmanteladas la falsedad de todas las acusaciones que se han realizado, quizá sea el momento para que alguien asuma responsabilidades y deje de estar instalado en su propia falsedad porque se ha hecho mucho daño tanto a la ejecución de la propia obra como a la profesionalidad y buen nombre de quienes tuvimos distintas responsabilidades en ella”.
