ALMERÍA.- La Central Independiente y de Funcionarios, CSIF Almería, exige la intervención del Ayuntamiento de Almería en el conflicto laboral que se ha producido en el seno de la empresa concesionaria del servicio de limpieza viaria, Entorno Urbano y Medio Ambiente. Así, la compañía despidió, la pasada semana, a ocho trabajadores e interpuso sanciones a 19 empleados, casualmente todos ellos miembros pertenecientes a las centrales sindicales mayoritarias en el Comité de Empresa.
A juicio del sindicato, esto es una mala práctica de Entorno Urbano y Medio Ambiente quien ha pretendido “castigar” a los trabajadores en plena negociación del convenio colectivo. En esta misma línea, CSIF sospecha que esta acción puede ser una maniobra para provocar la rescisión del contrato con el consistorio, alegando que la empresa no podría hacer frente al pago de los sueldos de la plantilla, según ha podido saber el sindicato.
Asimismo, CSIF también considera que estos despedidos y sanciones pueden estar provocados como represalia por las reiteradas ocasiones en las que el Ayuntamiento ha sancionado a la empresa por no cumplir con el servicio de limpieza.
Por todo ello, el sindicato solicita la implicación del Ayuntamiento, como directos responsables del servicio de limpieza y como garantes de las condiciones y derechos laborales de la plantilla de Entorno Urbano y Medio Ambiente. Tal y como indica el presidente del Comité de Empresa, Antonio Martínez, “el personal está preocupado, van a trabajar con miedo por las amenazadas reiteradas con nuevas medidas sancionadoras y más despidos e, incluso, la suspensión del pago de nóminas”.
Por último, CSIF reivindica una solución a la máxima brevedad y la intervención del ayuntamiento capitalino y, de no ser así, se tomarán las medidas y acciones necesarias, con un calendario de movilizaciones si los trabajadores despedidos y sancionados no vuelven a sus puestos. “En ningún caso vamos a permitir ser moneda de cambio en los conflictos entre ayuntamiento y empresa, dado que no pueden olvidar que, por un lado, esto afecta a cientos de familias directamente y, por otro, a todos los ciudadanos y vecinos de Almería”, apunta Martínez.
