SEVILLA, 15 (EUROPA PRESS)
La Sección Tercera de la Audiencia de Sevilla ha continuado este martes con la fase de informes de las partes del juicio relativo a las subvenciones autonómicas concedidas a la empresa de Dos Hermanas (Sevilla) Aceitunas y Conservas (Acyco), una pieza separada de la macro causa de los expedientes de regulación de empleo (ERE) irregulares o innecesarios y las ayudas directas y sin publicidad, con cargo a los presupuestos de la Junta de Andalucía.
Entre los informes presentados ha figurado el de la defensa de Andrés Carrasco Muñoz, natural de El Pedroso (Sevilla) y que cobró de una póliza de rentas formalizada merced al ERE promovido en 2003 por Acyco con cargo a los fondos autonómicos para extinguir 35 puestos de empleo, pese a no haber trabajado nunca este hombre para tal empresa.
Las prejubilaciones del ERE de Acyco, según han manifestado testigos e incluso algún acusado durante el juicio, fueron planteadas "en condiciones muy favorables", hasta el punto que para algunos de los beneficiarios implicaba algo mejor que un premio "de lotería", según aseguraba un exresponsable de Acyco.
Mientras en este juicio figuran como acusados, entre otros, el exconsejero de Empleo Antonio Fernández; el exviceconsejero del ramo Agustín Barberá; los exdirectores generales de Trabajo Juan Márquez y Daniel Alberto Rivera o la expresidenta del consejo de administración de Acyco Encarnación Poto, el abogado defensor de Andrés Carrasco ha esgrimido que su patrocinado es una persona "simple y honesta" que no conoce la "trama tan compleja e intrínseca" sometida a juicio. Así, ha defendido que Carrasco tuvo un papel "limitado" en los hechos, no equiparable a los de coautor o cooperador necesario.
Mientras en su primera comparecencia judicial este acusado manifestaba que era "amigo" del ex director general de Trabajo y Seguridad Social Francisco Javier Guerrero porque ambos eran naturales de El Pedroso, figurando Guerrero también como acusado en este juicio hasta su reciente muerte; su abogado defensor ha matizado que ambos eran "vecinos", pero ha negado que les uniese una "amistad íntima" o que el acusado gozase de capacidad de "influencia" sobre Guerrero.
LA "IMAGEN" DE GUERRERO EN EL PEDROSO
Y cuando en aquella primera comparecencia Carrasco declaraba que acudió a Guerrero para pedirle trabajo porque sus ingresos rondaban los "600 o 700 euros" al mes por regentar un quiosco de churros y tenía tres hijos, uno de ellos menor de edad y otros dos en su veintena; su abogado ha expuesto que en el momento de los hechos, allá en 2003, Guerrero era "la viva imagen del éxito" en El Pedroso y una persona "de referencia" dado el cargo que ostentaba, argumentando que la "situación" de Carrasco debió "mover la voluntad" de Guerrero y que el primero no tenía motivos para "sospechar nada" ni temer que los ingresos que le fueron dados derivasen de "irregularidades".
En ese sentido, ha invocado el "principio de confianza legítima con el funcionamiento correcto de la Administración pública", insistiendo en que Carrasco no tenía por qué "sospechar nada", sobre todo cuando en aquella época no pesaba "ninguna sospecha sobre la actividad de la Junta de Andalucía y la Consejería de Empleo" en materia de subvenciones.
Por eso, ha pedido la absolución del acusado, toda vez que el segundo "intruso" que cobraba de las pólizas del ERE de Acyco sin haber trabajado para la empresa era el exalcalde socialista de San Nicolás del Puerto Domingo Martínez, fallecido tiempo atrás, pesando el hecho de que Guerrero fue alcalde socialista de la cercana localidad de El Pedroso.
