ALMERÍA.- El sindicato SIPCTE ha denunciado que la oficina de Correos de San José lleva cerrada al público dos meses y recuerda que esta empresa "es y debe ser una puerta directa para los trámites ante la administración pública".
Nota de prensa
En la práctica el servicio de Correos en la actualidad es la única comunicación directa y personal de los ciudadanos con la administración pública, la cual ha optado por el teletrabajo y ha provocado una distancia entre los ciudadanos.
Correos no dispone de local propio en San José y paga a un trabajador la irrisoria cantidad de 20€ al mes por la aportación de un local, la empresa pública contrató a un trabajador eventual para ofrecer el servicio, pero este no dispone de local para atender las necesidades de la población debido al alto precio de los alquileres en la zona, por lo que el servicio se presta a las puertas de la oficina y en un vehículo privado.
Igual que un cajero automático y de la misma manera que nos hemos quejado que para las personas ancianas el cajero no es seguro, la oficina de Correos es un bien de primera necesidad para muchas personas.
Para el responsable del sindicato SIPCTE en Almería Francisco Sabio, “no es de recibo que un trabajador no pueda dar el servicio de admisión o entrega de envíos de Correos en unas condiciones dignas ya que la empresa no le ha facilitado una báscula o un local” “tampoco se le ha entregado un uniforme corporativo ya que los vecinos de la localidad no reconocen en este caso si la persona que se pone junto a la puerta (cuando hay aparcamiento) de la oficina es un trabajador de Correos”.
Desde el sindicato SIPCTE no entendemos como la empresa pública Correos puede sacar pecho en los eventos deportivos como la Vuelta Ciclista y que a su vez vende que está impulsando una 'ventanilla única' para administraciones, o soluciones contra la exclusión financiera en el ámbito rural, y tenga a los usuarios de la localidad de San José sin una ventanilla.
La ejecutiva nacional del sindicato SIPCTE va a tomar medidas contra el cierre de oficinas en toda España por el daño causado frente a la Admiración pública
