Elena Torres, teleprensa.com Almería
Es verdad que aún no ha comenzado pero las jornadas previas nos han metido en una espiral donde la muerte parece centrar todo el debate de la derecha. Comenzó con la negación del holocausto por parte de un supuesto historiador que iba en las listas de Vox y que, afortunadamente, parece que se ha retirado de la carrera electoral. Es verdad que sus declaraciones fueron de hace apenas tres años, pero puestos a analizar los perfiles de quienes optan a un cargo público, sus argumentos eran tan chirriantes y esperpénticos, además de crueles y nocivos para la historia que se hacía necesario cuando menos identificar al sujeto en cuestión.
Sin apenas reponernos, una vez más desde Vox, esta vez su líder Santiago Abascal, abrió la polémica del uso de armas para autodefensa como si estuviéramos viviendo en una suerte de país salvaje en el que a diario sufrimos asaltos en nuestras viviendas sin que policía alguno actúe al respecto. Víctimas desprotegidas a las que hay que dotar de medios para hacer frente a esos delincuentes que nos abordan sin miramiento en nuestra propia casa.
Por medio apareció México reclamándonos una disculpa pública por un genocidio de hace 500 años y como aquí somos más machitos que nadie, el candidato del PP, Pablo Casado, ante lo que debe entender una respuesta blanda del Gobierno socialista, salió raudo a proponer y llevar en su programa la celebración del quinto centenario de la llegada de Hernán Cortés a México, para que le quede clarito a su presidente López Obrador. “Basta de leyendas negras y de populismos”, y ya de paso creémonos enemigos en el exterior.
Y para colmo de males, de nuevo a vueltas con el aborto. El tema es recurrente para la derecha de este país pero en realidad si en España no nacen más niños no es porque se aborte mucho, las estadísticas dicen que los niveles van bajando, sino porque se prescinde de tener hijos, sin más. No obstante, como hay que hacer batallas de todo, el aborto se ha colado en precampaña y ahora sabemos gracias al PP que se puede abortar después del nacimiento ¿se han vuelto locos?
Lo cierto es que ninguno de estos temas es un problema para el españolito de a pie, me parece a mi, así que estamos enredados en una campaña de ocurrencias bastante desatinada.
