jueves. 28.03.2024

Ayuntamiento de La Mojonera

LA MOJONERA.- El alcalde de La Mojonera, José Miguel Hernández, ha anunciado la próxima revisión parcial de los valores catastrales del municipio con el fin de aliviar la presión fiscal de algunos inmuebles que sufrieron el estallido de la burbuja inmobiliaria. La medida se suma a la bajada progresiva de los recibos, que se viene aplicando desde el año pasado, así como las facilidades que se han dado para que propietarios con terrenos urbanos en zonas de difícil desarrollo, pudieran pasarlos a rústicos, con el consiguiente ahorro.

«Son medidas que los vecinos necesitan para aliviar la carga fiscal que se aplica sobre sus propiedades, teniendo en cuenta que la realidad urbanística actual no es la misma que cuando se hizo la actual ponencia de valores, y valorando también el esfuerzo que las familias vienen realizando durante todos estos años», ha afirmado el primer edil.

En concreto, en el caso de la revisión parcial de la ponencia de valores, se solicitó al Catastro la revisión de las valoraciones que se hicieron en plena burbuja inmobiliaria, encontrándose valoradas algunas zonas en función a unas expectativas de desarrollo urbanístico que en la actualidad no existen. Será por tanto una revisión casi quirúrgica en esos lugares concretos en los que los valores son más altos que las condiciones actuales y las que se prevén en un futuro próximo.

La revisión, que según ha asegurado José Miguel Hernández, tendrá efecto en los recibos para el próximo año 2019, ha sido ya confirmada por el Catastro al Ayuntamiento de La Mojonera.

Esa medida conocida estos días, se une a otra ya adoptada por el actual equipo de Gobierno de La Mojonera, como es la bajada progresiva en los recibos, que se viene aplicando desde 2017 y que se prolongará hasta 2019, tres años en los que los recibos se habrán recortado en un 15% en total. Así, en 2017 ya se recortaron en un 8 por ciento, mientras que para este año la reducción fijada es del 4 por ciento y de cara a 2019 será del 3 por ciento.

«Hemos bajado lo que nos autorizan, no podemos bajar más de eso, pero la idea es que dentro de las posibilidades legales que tenemos, podamos seguir aliviando la presión fiscal que soportan las familias», ha insistido José Miguel Hernández, quien ha destacado los buenos datos económicos que tiene el Ayuntamiento de La Mojonera tras haber atravesado una situación muy problemática, con atrasos en los pagos a la Seguridad Social de casi un millón de euros y con problemas en el pago a proveedores que situaban al municipio entre los que peor pagaban de toda Andalucía. Ahora, tras años de ajustes y saldar cuentas pendientes, el Ayuntamiento está ya bajando los impuestos, manteniendo los servicios, algo que se ha logrado, según el alcalde, recortando gastos superfluos y derroches de épocas anteriores.

Urbano a rústico
La revisión de los valores y el recorte de los recibos, se une a otra medida adoptada para que los más afectados por el estallido de la burbuja inmobiliaria pudieran pagar menos en los recibos. A finales de 2015 el Ayuntamiento aprobó el cambio de la denominación de suelo urbano a rústico a alrededor de 300 vecinos, que venían pagando el IBI muy alto en base a los planes urbanísticos de crecimiento, que tras la crisis inmobiliaria han quedado descartados por el momento. «Esos propietarios han podido pasar a rústicos sus terrenos con recortes muy importantes en los recibos, que en algunos casos han pasado de los 1.900 a los 1.000 euros o de los 1.600 a los 500 euros», recordó el alcalde mojonero.

Los valores catastrales serán revisados parcialmente el próximo año, mientras siguen...