López Escobar, en Tarambana
EL EJIDO.- “El pueblo está sucio, El Ejido está muy sucio, y los núcleos urbanos ni qué contar”, expresa Izquierda Unida El Ejido, “al Equipo de Gobierno no les importa que sus vecinos y vecinas no esté contentas con el estado del municipio, les da igual cuántas veces nos quejemos en pleno”.
“La gestión del PP ejidense no deja de hacer aguas. Hemos advertido en innumerables ocasiones la situación de muchos barrios y núcleos urbanos de El Ejido, donde el problema de limpieza unido con la subida de temperaturas está propiciando problemas de insectos, lo que pasa de ser un tema de estética a ser un problema de salud pública”, afirma el concejal portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida El Ejido, Juan Antonio López Escobar.
Y es que, según el criterio de Izquierda Unida, “si el servicio es deficiente en el centro de El Ejido, en núcleos como Pampanico, San Agustín o Tarambana es casi anecdótico, sitios donde no se ha visto por primera vez aún el furgón hidrolimpiador, por ejemplo”. Para el edil López Escobar se trata de un agravio comparativo muy grave, ya que “los mismos impuestos paga el que vive en el centro que el vive en el punto más alejado dentro de nuestro término municipal, por lo que ningún ejidense debería ser tratado como vecino de segunda”.
No obstante, la organización de izquierdas ha querido romper una lanza a favor de los trabajadores del servicio recogida de residuos sólidos y limpieza urbana: “Las y los trabajadores se ven afectados por partida doble, como vecinos receptores de este servicio deficiente y a la vez como personal laboral sin la maquinaria necesaria y con unas rutas de trabajo inviables por su extensión y la ausencia de nuevas incorporaciones”.
“El alcalde, cuando firmó con Lirola Ingeniería y Obras, nombre curiosamente parecido al de la empresa anterior, nos aseguró que notaríamos la mejora del servicio. Los meses pasan y pasan y en las calles se sigue acumulando la basura, otra prueba a añadir a la larga lista de fallos en la gestión del señor Góngora”, reflexiona Juan Antonio López Escobar.
