jueves. 25.04.2024

Taller de cuerda pulsada

ALMERIA.- Un buen músico se hace a base de mucho trabajo. Al menos, así lo entiende el profesor Octavio Lafourcade, que imparte esta semana un taller de cuerda pulsada dentro del curso de verano ‘La música, el poder y la cultura en la España Moderna’ que celebra la UAL en Vélez Blanco. De hecho, el profesional defiende que “la música tiene un 80 por ciento de transpiración, es decir, de trabajo, y un 20 por ciento de inspiración”.

Sus alumnos son, en su mayoría, jóvenes intérpretes de laúd que realizan durante estos días una aproximación al repertorio de cuerda pulsada basado, sobre todo, en el Renacimiento y en los instrumentos de la época, es decir, en el laúd renacentista y la vihuela, principalmente, aunque “algunos traen ya cosas preparadas”.

“Hay un repertorio interesantísimo en estos instrumentos” que, explica el intérprete, son fundamentales para la ejecución de la música antigua.

Aunque los guitarristas “tienen la mitad de la técnica ya aprendida” para aproximarse a estos instrumentos, Lafourcade desvela algunas diferencias. “La mano derecha, por ejemplo, es un poco diferente y el sonido es más armónico y tiene más resonancia porque son instrumentos de menor volumen que las guitarras”, describe. Su sonido es, en definitiva, “más delicado”, puntualiza. “Luego está el tema de la estética en el estilo y en la interpretación”, continúa.

El profesor destaca, por otra parte, el resurgir de estos instrumentos en los últimos años. Algo que no sucedía antes porque “se veían como algo arcaico y tampoco se había incorporado su enseñanza oficial a los conservatorios”. “Ahora todo eso ha cambiado y se pueden estudiar estos instrumentos muy bien en los conservatorios”, asegura.

Asimismo, defiende, la afición hacia esta música se debe a que “hay una búsqueda en el pasado de ciertos espacios sonoros más íntimos como contrapunto de un mundo tan ruidoso y violento como el de hoy en día, que provoca que la gente se vuelva hacia este minimalismo”.

Como en la ejecución de cualquier instrumento, el intérprete de cuerda pulsada debe “tener unas facultades mínimas y, sobre todo, el trabajo y estudio porque la base de un músico es el trabajo, aunque haya gente que tenga más talento que otra”.

Octavio Lafourcade Señoret nació en Santiago de Chile y realizó sus estudios musicales en la Facultad de Música de la Universidad de Gill, en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid y en la Escuela Superior de Música de Colonia. Es licenciado en Música, profesor superior de guitarra y laúd y miembro fundador del grupo de música antigua Capella de ministres. Es, además, doctor y profesor de laúd en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid.

“La música tiene un 80 por ciento de transpiración y un 20 por ciento de...
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