viernes. 29.03.2024

ALMERÍA.- Un grupo de diez personas, que son atendidas en el centro de la asociación CEPAIM en El Ejido  ha sido recibida por la Universidad de Almería para que vean el campus como una oportunidad para formarse. Les ha recibido en el hall de la Biblioteca Nicolás Salmerón el director de la misma, Arsenio Gutiérrez. Bernardo Claros, director del Secretariado de Atención y Orientación al Estudiante del Vicerrectorado de Estudiantes, Igualdad e Inclusión, ha asegurado que de estos chicos y chicas tienen “dos de ellas ya con el Estatuto del Refugiado y las restantes en los trámites de la petición de asilo”. El objetivo de esta actividad es que “todos los años el Vicerrectorado de Internacionalización convoca ayudas para refugiados y solicitantes de asilo, y en muchas ocasiones quedan vacantes porque no conseguimos llegar a ese colectivo y animarle a que sus integrantes den el paso a la universidad desde sus estudios previos”, ha especificado Claros.

Esto sucede “por desconocimiento y porque cuando llegan tienen una problemática más grave a la de pensar en ponerse a estudiar, o renovar o retomar sus estudios universitarios, ya que traen consigo tragedias personales, y pese a que muchos querrían matricularse, primero necesitan lo más básico, que es mantenerse, poder comer y vivir en España de forma autónoma sin ayudas”. Dicho eso, también es cierto que con este “primer paso de la visita” se pretende que sepan que la Universidad de Almería “está para abrirles un horizonte más, una alternativa más a su situación personal, que sean conscientes de que está aquí para que vean la UAL como una posible opción de futuro”. En concreto, Internacionalización oferta diez becas de matrícula, dos de residencia y manutención y cinco para el aprendizaje del idioma, todas ellas a su disposición. La organización de la UAL no se compone de compartimentos estancos, y muestra de ello es esta colaboración entre ambos vicerrectorados, con salida desde los contactos del Programa de Voluntariado.

Las procedencias de estas diez personas que han realizado la visita guiada son diversas, “Sáhara, Marruecos, Camerún, Senegal, Venezuela, Colombia…”, presentes en el campus porque “cree la UAL que un elemento básico del compromiso social es que la sociedad real, la que está en la calle, esté también representada en sus mismos porcentajes en sus aulas, y hay cierta carencia de esta gente que ha llegado a la provincia por mil razones distintas, en muchos casos, perseguidos en su país de origen, como sucede con un chico que hasta ha sido condenado a lapidación por su condición de homosexual”. Para Bernardo Claros, “es un colectivo al que debemos una atención especial”. Evidentemente, esas diez personas tienen ya culminados sus estudios universitarios o los dejaron a medias cuando salieron de sus hogares: “Dos de ellos han pedido la homologación de título en un caso y la convalidación de estudios parciales en otro caso”. 

La primera parte de la visita se ha dedicado a “exponerles las opciones, que desconocían, tales como las citadas de convalidación, homologación de estudios, tramitación administrativa…” y la segunda parte ha consistido en “ver las instalaciones, la biblioteca, Deportes, ARATIES… para que esa sensación de cercanía de la universidad”. Se les ha transmitido que “se trabajará cada caso individual a todos los niveles, el administrativo, el ingreso y el social, con posibilidad de diseñar ayudas específicas”. Desde el hall de la biblioteca han iniciado el recorrido, siendo muy llamativa la parte de, según les ha resumido Arsenio Gutiérrez, “16.000 metros cuadrados con 1.980 puestos de lectura repartidos en 9 salas, máquina de auto-préstamo de 135 portátiles, fondo de 237 mil libros impresos y 300 mil electrónicos, más 28 mil suscripciones a revistas científicas y salas de trabajo en grupo, sin olvidar sala de formación y seminario de docencia”. El ambiente, espectacular, porque “en época de exámenes por aquí pasan unas cinco mil personas al día, con apertura de fin de semana para atender la demanda del colectivo estudiantil”.

La UAL muestra a estudiantes refugiados su oferta de becas