sábado. 20.04.2024

El Joglars

EL EJIDO.- El Teatro Auditorio de El Ejido rindió anoche homenaje a la compañía catalana El Joglars, sin duda, una de las más conocidas por el público ejidenses, puesto que se trata de un grupo que ha tenido una gran presencia a lo largo de los últimos 40 años de la historia de nuestro Festival de Teatro,  es así que en la edición de 1992 ya aparecía esta compañía dentro de esa programación teatral del municipio.

Su apuesta por el municipio junto con la gran trayectoria en sí que acumula en Els Joglars, tras algo más de cinco décadas sobre los escenarios, han sido razones suficientes para que el Ayuntamiento de El Ejido haya decidido otorgarle una butaca de honor la platea del Teatro Auditorio, encontrándose ésta en la fila 14 junto a la de Albert Boadella y José Sacristán.

El homenaje tenía lugar anoche tras finalizar con éxito la representación de su último trabajo ‘Zenit. La Realidad a su Medida’ y tras varios minutos de aplausos, ovaciones y con el público puesto en pie, la concejala de Cultura, Julia Ibáñez, acudía al escenario para comunicarle a los miembros del grupo catalán el reconocimiento que la ciudad de El Ejido y su festival ha tenido a bien otorgarle por su aportación a la cultura, su trayectoria profesional y, sobre todo, su dedicación al teatro. Tras ello, todos los miembros de El Joglars acompañaron a la edil para dirigirse a la platea del Teatro Auditorio dónde les esperaba el que, hasta hace muy poco tiempo, ha sido su director Albert Boadella.

Allí todos ellos eran los encargados de descubrir la placa que se ha colocado para identificar esa butaca de honor. Lo hicieron entre los aplausos y las felicitaciones de un público que llenaba el aforo existente. Actores y directores de la compañía se mostraron  muy agradecidos por el gesto y por la entrega de un público que es el que le ha hecho merecedor de este reconocimiento.

Tras el homenaje acabaría un noche más de puro teatro en El Ejido, dónde el público disfrutó, y mucho, con una historia en la que El Joglars bucea en la trastienda de los medios de comunicación para satirizar a todos aquellos periodistas que, según ellos, no atienden a la ética periodística. Ambientada en la redacción de un periódico y con una escenografía minimalista en la que las luces juegan un gran papel, la obra ofrece una visión global del sector.

Sin duda, una crítica que,  entremezclado entre fragmentos de musical y la palabra, pone de manifiesto la fatídica transformación que han sufrido ciertos periodistas convertidos en media workers y en enfrentados entre ese periodismo objetivo y serio o la voracidad de un medio lleno de intereses. 

El Joglars recibe el reconocimiento de butaca de honor en el Teatro Auditorio de El Ejido
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