ALMERÍA.- El primer teniente alcalde, Miguel Ángel Castellón, ha reprochado al portavoz del grupo municipal socialista, Juan Carlos Pérez Navas, que “una vez más se ponga del lado de la Junta de Andalucía y no de los problemas de los almerienses, lo que, por desgracia, ya no nos sorprende porque viene siendo la postura habitual del portavoz socialista”.
Castellón ha censurado a Pérez Navas que “en un tema tan importante como es el del agua y ante la situación desesperada de los regantes de la capital una vez más los dirigentes del PSOE en Almería no estén a la altura de las circunstancias, anteponiendo los intereses partidistas a las necesidades de los agricultores almerienses”.
El edil popular ha dicho “no entender si lo que está proponiendo el señor Pérez Navas es que el Ayuntamiento no cumpla sus ordenanzas y rompa unilateralmente los contratos que tiene firmados con las empresas concesionarias de los servicios” y ha criticado, en este sentido, “que venga tarde y mal con unas propuestas que van en contra de los intereses de los regantes” en lugar de ponerse de su parte.
“Ante los problemas de los regantes y los agricultores, lo que debería haber hecho es intermediar con la Junta de Andalucía para impedir que, a día de hoy, sigamos tirando al mar 14 Hm3 de agua depurada que bien podrían emplearse para riego, lo que también supondría un menor coste para los regantes y agricultores”, ha señalado Castellón, quien ha insistido en que la posición del Ayuntamiento seguirá siendo “la de ayudar a los agricultores”, al tiempo que va a exigir a la Junta “que subvencione el agua desalada que van a tener que utilizar ahora para sacar adelante sus cultivos”, recordando que la situación derivada del corte de agua depurada para el riego, decretado por la Junta, “no sólo afecta a los regantes de la capital, sino también para los de municipios limítrofes”.
El también concejal de Desarrollo Urbano ha lamentado que la Junta, que es quien tiene competencias en esta materia, “haya generado un problema a la agricultura almeriense al decretar el corte y no prever una solución alternativa”, poniendo con ello en peligro el futuro de muchas familias.
Finalmente ha insistido en el despropósito y la injusticia que supone para los agricultores la solución que avala Pérez Navas, del lado de la Junta, ante el hecho de que “un agua que ahora se tira al mar, después haya que volverla a coger, desalarla con una infraestructura que ahora mismo no existe, y cobrarla a los agricultores al doble del precio que vienen pagando hasta ahora”.
