jueves. 28.03.2024

ALMERÍA.- El último fin de semana, Obras Públicas-Junta Provincial de Carreteras del Ministerio de Fomento ha intervenido la vieja curva de la carretera nacional 340 a la altura del yacimiento arqueológico de El Chuche. Los recientes trabajos han supuesto el desmonte y allanamiento de casi 8000 m2, obras que han invadido prácticamente 1000 m2 de un yacimiento arqueológico prehistórico, ibérico, púnico y romano protegido.

Para muchos autores, este yacimiento sería la ciudad ibero-romana de Urci (antigua Almería). En mayo de 1999 se preserva legalmente el yacimiento. Pero, a pesar de que la zona estaba protegida como Bien de Interés Cultural (la máxima figura de protección legal) desde hace casi 18 años, ahora se han destruido elementos arqueológicos del tipo Millares de la Edad del Cobre con una antigüedad de más de 4500 años (tumba excavada entre 1971 y 1972 por Ochotorena, Perceval y García Giménez, cuyos materiales arqueológicos guarda el Museo Provincial).

Así pues, el yacimiento de El Chuche reunía todos los requisitos para sentirse protegido y a salvo. Había sido declarado Bien de Interés cultural que es la máxima figura de protección en España, había sido delimitado y había sido incluso amojonado para que no hubiera ninguna duda de su estado. Pero ha sido nada menos que toda una administración pública la que lo ha destruido parcialmente.

Ahora, vuelve a repetirse la descoordinación entre administraciones para la protección de nuestro Patrimonio Histórico. Se acusan unas a otras para escurrir sus responsabilidades, y en casos como este, algunas huyen hacia adelante manifestando que ha “eliminado un vertedero incontrolado” (¿es eso un yacimiento declarado BIC?).

Recordamos el caso de Turaniana afectada de forma negligente por la realización de infraestructuras, la ausencia de seguimiento arqueológico en la autovía que cruza el Campo de Dalías o el penoso estado de los yacimientos arqueológicos de la Comarca.

Athenáa, comprometida con el patrimonio histórico, arqueológico y cultural de El Ejido y su comarca desde hace más de 30 años, debe protestar por este atropello al patrimonio de Almería. Quizá algunos lo ignoren, pero un yacimiento arqueológico es como una biblioteca llena de libros y manuscritos únicos, que una vez que desaparecen nadie puede reemplazar.

Por ello, mostramos nuestro más profundo rechazo a estos hechos y denunciamos la inseguridad de los yacimientos arqueológicos de Almería, su abandono y falta de protección real, así como el nulo compromiso existente en su investigación y puesta en valor.

No somos pocos, pero aunque lo fuéramos el Patrimonio Histórico y Cultural que defendemos es de todos. Así que merece la pena alzar la voz una vez más y pedir que se cumpla la ley y que todos asuman sus responsabilidades.

Athenáa se suma a la protesta por la destruccion de parte del yacimiento arqueológico...