Álvaro Cabo
El analfabetismo geográfico afecta a nuestro bienestar económico, nuestras relaciones con otras naciones y el medioambiente, y nos aísla del mundo. “Sin geografía nuestros jóvenes no están listos para enfrentar los desafíos del cada vez más interconectado y competitivo mundo del siglo XXI”. John Fahey, presidente de la Sociedad National Geographic.
Como he podido comprobar no solo es un problema en nuestro país, sino que se extiende por todo el mundo. Para mí, el saber geografía es tan importante como saber historia, porque conociendo la situación de cada lugar que nos describen es mucho más fácil imaginarse qué ocurrió o qué ocurre y podamos analizar el porqué de las cosas que pasan. Sin embargo, muy a mi pesar, me encuentro con personas de todas las edades que no saben situar países, ríos o montañas en un mapa y tampoco conocen las banderas ni las capitales de los respectivos países.
Supongo que la curiosidad de cada uno por saber, es lo que nos hace preocuparnos por conocer donde se sitúa cada lugar de nuestro planeta, qué gente lo habita, qué costumbres tiene, de qué penfermedades mueren... pero aparte de eso, un analfabetismo geográfico mundialmente generalizado nos lleva también a un conformismo generalizado, lo que nos cuenten nos lo creemos y ya está. Y eso no debería ser así.
Para aprender geografía o historia no es necesario coger un atlas o un libro aburrido e intentar aprendertelo de memoria. Hay otras formas de aprenderlo y además sin darnos cuenta de las que me gustaría hablaros. Desde mi propia experiencia y diciendo de antemano que yo debido a la edad que tengo y en el curso en el que estoy todavía no he estudiado, cosa que no me parece lógica y que de nuevo tengo que criticar al sistema educativo, por no implantar un método más efectivo y desde edades más tempranas, para que los niños sepamos como está distribuido el mundo mucho antes.
Gracias a la gran cantidad de aficiones que tengo y que seguro muchos de vosotros también, tengo unas nociones de geografía e historia que quizá si no las practicara no las tendría.
La lectura de los libros de Tintin, es una fuente inagotable de lugares del mundo por los que pasa el protagonista, además con aventuras que te trasladan en el tiempo por lo que también aprendes historia, costumbres y te obliga a discurrir. Cuando no sabes donde está el lugar del que están hablando, lo buscas en algún libro o internet y una cosa nueva que acabas de aprender.
Aprendes valores como la amistad, compañerismo, el trabajo en equipo, el amor y respeto a los animales y a descubrir profesiones como la de periodismo, detective, capitán de barco. Y también los peligros de la vida, como la existencia de gente indeseable como los narcotraficantes y de personas que tiene vicios autodestructivos como el alcoholismo.
El globo terráqueo, me lo regaló mi tío Juan Carlos cuando cumplí los 7 años y con él he aprendido además de situar exactamente todos los países, capitales, montañas...gracias a que se puede actualizar por internet te puedes enterar de las noticias más importantes que ocurren en cada país, de la demografía, del clima, de los índices de mortalidad y natalidad, los husos horarios. de quién es el presidente y hasta de la distancia que hay en avión de un lugar a otro y el tiempo que tardarías en llegar.
Los puzzles
Concretamente con este puzzle estuve entretenido muchas horas de siesta. Ahora presumo de él en mi habitación y cómo lo tengo en frente, mientras que hago los deberes lo voy mirando y sin querer el mapa y los lugares se te van quedando grabados en la cabeza.
Los cromos de fútbol
Mientras que la gente piensa que con el fútbol no se puede aprender nada, salvo regatear, chutar y demás técnicas, con mi inversión en colecciones de cromos, he aprendido a negociar, a que puedes y te pueden engañar y timar, a lanzar ofertas, a subastar... ¡Además he aprendido geografía e historia!
¿Cómo? Aprendiendo los lugares de nacimiento de los jugadores de la liga nacional y de los campeonatos internacionales, como los mundiales, eurocopas, copas de América (si tengo la ocasión de que mis tíos puedan traerme cromos de sus viajes) o champions league.
También me gusta aprenderme la ciudad de procedencia de equipos internacionales, así he conseguido ampliar bastante mis competencias en los concursos diarios de geografía con mi padre. También puedes aprender aunque no es necesario hasta el peso y la talla de cada jugador y fardar un poco con tus amigos.
La numismática
Gracias a ella he aprendido muchísimo sobre la historia de cada país y sus localizaciones. Además como muchos billetes y monedas vienen en árabe, japonés o chino, para descifrarlo he tenido que aprenderme los alfabetos de estos países. A parte, también puedes aprender a negociar e identificar lo que de verdad tiene valor o no. Tener estas monedas y billetes entre tus manos, es tenr un trozo de historia.
Los atlas geográficos
Hoy en día vienen muy bien ilustrados, con imágenes en 3D y con DVD en el que nos explican con detalle las situaciones, costumbres e infinidad de curiosidades.
Las aplicaciones para móviles y tablets
Con estas aplicaciones te puedes entretener mientras aprendes las banderas, capitales o países, además tienen una función en la que puedes ir haciéndolo cada vez en menos tiempo y batiendo records.
Rellenando mapas, una vez que tengas los conocimientos necesarios te puedes lanzar a rellenar mapas que es de la manera en la que sabrás de verdad si sabes situar bien las localizaciones.
Documentales, existen gran cantidad de ellos de geografía e historia que además son gratuitos en televisiones a la carta en los que se aprende muchísimo
Y para terminar solo me gustaría hacer una reflexión al respecto. Si con todos los medios que tenemos a nuestro alcance no somos capaces de aprender geografía es que no queremos. Nuestros padres aprendieron con un atlas para toda la familia y el que tenía suerte con una bola del mundo.
Me gustaría pedir a todos los colegios que hicieran concursos de geografía e historia para todos los alumnos, e incluso sería recomendable trasladarlo a las televisiones, porque creo que es la mejor manera de motivarnos para aprender algo imprescindible para nuestra vida.
El pueblo que no conoce las relaciones que se dan en su espacio geográfico, está condenado a padecerlas. José Ignacio Ossa.
Álvaro Cabo Ciudad - http://mipaisatravesdemisojos.blogspot.com.es
