ALMERÍA.- El Almería comenzó con autoridad la Liga al vencer 0-1 al Nástic en Tarragona mostrando, además, muy buenos argumentos futbolísticos, ya que el equipo tuvo personalidad, hizo un gran trabajo, jugó con criterio, fue intenso y actuó con verticalidad. Caballero puso el 0-1 en el minuto 29, aunque nuestros representantes dispusieron de ocasiones para haber ampliado su ventaja. También las tuvo el Nástic, pero René estuvo espectacular.
Luis Miguel Ramis puso en liza un once con cuatro caras nuevas con respecto a la anterior temporada, caso del portero René, los dos medios centros Mandi y Rubén Alcaraz, y el delantero Pablo Caballero, además de Gaspar, procedente del filial, que fue titular por la banda derecha. La defensa fue la misma del pasado ejercicio con Motta, Joaquín, Morcillo y Nano; Pozo continuaba en la media punta y Fidel por la izquierda.
El encuentro comenzó con un susto para el Almería, ya que en el minuto 2 el Nástic tuvo una clara ocasión ante la que se lució René con una brillante intervención. A partir de ahí el conjunto de Ramis empezó a mostrar sus argumentos futbolísticos, haciéndose fuerte en la medular, moviendo con criterio el balón y poniendo gran intensidad y verticalidad en su juego.
Como consecuencia de ello el Almería dispuso de claras oportunidades. Pozo, en el 11, lanzó desde la frontal del área y la pelota se fue a córner. A la salida de éste, Morcillo tuvo otra ocasión. En el 13 Fidel, tras una recuperación de Pozo, mandó su disparo al lateral de la red. En el 18 Caballero no acertó después de una brillante jugada por la izquierda de Fidel.
El conjunto almeriense mandaba, se mostraba sobrio, si bien en el 21 tuvo otro susto, y de nuevo René, muy seguro en la portería, evitó el gol en un remate a bocajarro de Maikel Mesa. Y el que el Nástic también buscaba con ahínco la meta de nuestros representantes.
En cualquier caso el Almería estaba cómodo sobre el campo, hacía un excelente trabajo, y recuperaba muchos balones. En el 29 Fidel se hacía con la pelota en el centro del campo, cedía para Pozo y éste asistía perfectamente a Caballero que definía dentro del área para hacer el 0-1. La jugada fue un claro ejemplo de fútbol del equipo de Ramis, que tenía solvencia en defensa, fortaleza en la medular y mordiente arriba. Pozo y Fidel, realizaron un excelente primer tiempo, dentro de la buena tónica general de todo el equipo.
A los tres minutos de la reanudación Caballero tuvo el 0-2, tras otra brillante acción del Almería. Rubén Alcaraz lanzaba una falta en largo, Pozo controló, abrió para Fidel, éste centró al argentino, que sólo ante el meta rival no acertó a controlar y rematar bien. Los de Ramis volvían a mandar; tenían el control, dominaban y llegaban arriba con mucho peligro.
Poco a poco el Nástic fue ganando terreno, jugaba en casa e iba por debajo en el marcador, con lo que el partido entró en una fase de alternativas en las que los porteros fueron protagonistas. René, en dos ocasiones consecutivas, se exhibió en el minuto 60, y posteriormente, en el 77 fue el meta tarraconense el que se lució ante un gran disparo de Fidel. René de nuevo fue clave en el 89, cuando el Nástic estaba ya a la desesperada frente a un Almería sobrio y seguro, que también tuvo suerte al final cuando Maikel Mesa, rozando el fuera de juego, disparó a portería y el balón era rechazado por el poste.
